Tres personas de 54, 51 y 53 años de edad fueron investigadas por los agentes del Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) tras ser acusados de realizar vertidos de neumáticos fuera de uso en zonas arboladas de Peñafiel, Olmos, Rábano, Castrillo de Duero en Valladolid y Nava de Roa (Burgos). En concreto, abandonaron más de 600 ruedas y habrían vertido al medio natural, principalmente en masa forestal, más de 7.000 kilogramos de residuos. La Guardia Civil les acusa de un delito contra los Recursos Naturales y el Medio Ambiente.  

Durante los meses de febrero y marzo, los agentes descubrieron estos vertidos ilegales e iniciaron las actuaciones pertinentes para el esclarecimiento de los hechos, por si pudiera tratarse de un Delito Contra los Recursos Naturales y el Medio Ambiente. El modus operandi del autor o autores era siempre el mismo, buscaban lugares alejados de poblaciones para ocultar los vertidos en zonas arboladas. Debido a la entidad y el volumen de los vertidos, posiblemente se realizaban con un vehículo de grandes dimensiones (vehículo comercial), por lo que los autores podrían ser profesionales dedicados al montaje de neumáticos.

Tras las inspecciones realizadas por el Seprona en varios talleres mecánicos de la zona dedicados al montaje y reparación de neumáticos, se centra la investigación en una actividad ubicada en la localidad de Peñafiel. Durante la investigación también son descubiertos dos depósitos no autorizados, donde se almacenaban más de 1.000 neumáticos fuera de uso (pudiendo superar los 11.000 kilogramos). Estos lugares carecían de licencia ambiental, licencia de actividad para su funcionamiento y no poseían las condiciones mínimas de seguridad exigidas por la legislación vigente.

El Juzgado de Instrucción de Guardia de Valladolid y a la Fiscalía de Medio Ambiente y Urbanismo de Valladolid.