Los alumnos y profesores de Castilla y León iniciarán el curso escolar 2022/2023 sin que la Consejería de Educación haya aprobado la parte autonómica del currículo educativo. Y es que, la consejera de Educación de la Junta de Castilla y León, Rocío Lucas, reconoció ayer que hasta finales del mes de septiembre no se procederá a la aprobación de la parte autonómica correspondiente al 40 por ciento del nuevo currículo educativo que, en todo caso, aseguró que «se va a aplicar» este curso.

Ante esta situación, desde la Consejería de Educación aseguran que pondrán «todas las flexibilidades» al profesorado para que adapte las exigencias de dicho currículo a su programación didáctica, facilitando el borrador previamente a su aprobación. Para ello, ampliarán el plazo para que presenten sus programaciones, que normalmente finaliza en octubre pero que este año se aumentará hasta los meses de diciembre o enero.

La titular educativa autonómica no dudó ayer en criticar que el Gobierno pida para el inicio del curso la actualización de la parte autonómica de los currículos. «Lo que no pueden esperar es que si tardan 15 meses (en elaborarlo), ahora un decreto que se tarda entre cinco y seis lo hagamos en un mes», señaló la consejera durante un acto en la provincia de Soria.

De esta forma, recordó que desde la Junta siempre han reivindicado «que este curso la parte autonómica de los currículos no iban a poder estar en junio si los del Gobierno los tienes en abril, por sentido común y plazos». Por ello, exigió al Ejecutivo nacional que «se demorara un curso la aplicación de los Reales Decretos porque, evidentemente, no iba a dar tiempo».

«Así estamos diez comunidades que sí hemos querido ejercer ese 40 por ciento de nuestra autonomía», continuó esgrimiendo Lucas. Sin embargo, al comenzar a aplicarse ya este curso los nuevos currículos educativos aprobados por el Gobierno, desde la Consejería de Educación insisten en que trabajan para lograr que la parte autonómica llegue para finales de septiembre y ya este curso se incluyan los criterios marcados por la Junta bajo la premisa de «enriquecer nuestro currículo y seguir mejorando la calidad del sistema educativo», frente a los textos del Ministerio que «siempre nos han parecido insuficientes y que dejaban mucho que desear desde el punto de vista curricular».

Certezas

La Confederación de Federaciones de Asociaciones de Padres y Madres de Alumnado de Centros Públicos de Enseñanza de Castilla y León (Confapacal) reclamó a la Junta «certezas» ante el inminente inicio del nuevo curso escolar, después de tres años «muy difíciles, cargados de inseguridad e incertidumbre debidas a la situación de pandemia». Así, piden a laConsejería concreción en aspectos como el desarrollo curricular de la Lomloe, además se cuestionan si el profesorado está realmente preparado para afrontar la apuesta por el aprendizaje competencial.