Carpetazo definitivo al sueño del oro negro

Ical
-

El BOE publica la extinción definitiva de la concesión de explotación del yacimiento de petróleo de la Lora. La Compañía Petrolífera de Sedano está en concurso de acreedores, por lo que el Estado deberá asumir el coste de desmantelamiento

Carpetazo definitivo al sueño del oro negro - Foto: Christian Castrillo

Una orden ministerial publicada este sábado en el Boletín Oficial del Estado (BOE) declara la extinción definitiva de la concesión de explotación de hidrocarburos líquidos y gaseosos Lora, la del yacimiento de petróleo más antiguo de España ubicado en el municipio de Sargentes de Lora (Burgos).

Dicha concesión, que fue adjudicada en el año 1966 y no fue renovada en 2016, afectaba a una superficie de 10.619,28 hectáreas y en la actualidad pertenecía a la Compañía Petrolífera de Sedano (CPD), sociedad que fue declarada en concurso de acreedores en octubre de 2021 sin concluir los trabajos de desmantelamiento y abandono definitivo del yacimiento.

Por esta razón, el Gobierno no devolverá a esta compañía la garantía depositada y la Dirección General de Política Energética y Minas procederá a su ejecución. Además, el Ministerio de Transición Ecológica y Reto Demográfico deberá asumir estos trabajos de desmantelamiento pendientes que tendrán un coste superior a lo obtenido con la garantía.

El plan de abandono se aprobó en 2017 y contemplaba una primera fase denominada como desmantelamiento parcial, que sí fue ejecutada. La segunda fase del plan, consistente en el abandono definitivo de los pozos del campo y en el desmantelamiento de sus instalaciones remanentes, es la que ha quedado sin realizar pese a contar con la declaración de impacto medioambiental aprobada.
De hecho, el Gobierno no tiene constancia de que las instalaciones existentes se encuentran en condiciones seguras para las personas, los bienes y el medio ambiente.

El petróleo brotó por primera vez en Lora en 1964. El permiso de explotación fue concedido a Campsa, Calspain y Texaco en 1966. Desde entonces la Compañía Petrolífera de Sedano pasó por las manos de las empresas Amospain (filial de Standard Oil y Texaco), Chevron, Repsol, Northern Petroleum, Ascent Resources y Leni Gas&Oil.

Esta última intentó en, al menos, dos ocasiones deshacerse de CPS o llegar a acuerdos con otras firmas para la explotación conjunta pero no tuvo éxito. Actualmente se denomina Columbus Energy Resources.