El incendio de Gredilla de Sedano, en el norte de la provincia de Burgos, ha sido rebajado a nivel 0 por la Junta de Castilla y León tras afectar a más de 30 hectáreas de arbolado. El fuerte viento que soplaba este jueves ha dificultando las labores de extinción del incendio que se ha originado esta mañana en el Valle de Sedano. De hecho, los medios aéreos han tenido que cesar el vuelo en varios momentos durante la jornada. Además, el terreno irregular y la vegetación seca debido a la ausencia de lluvias han complicado igualmente el trabajo de los medios terrestres en el lugar.
Según informan fuentes territoriales, el incendio forestal se encuentra activo desde esta mañana. Inicialmente, tres agentes medioambientales, una cuadrilla terrestre, una autobomba y un helicóptero integraban el operativo del Plan de Protección Civil ante Emergencias por Incendios Forestales en Castilla y León (INFOCAL), al que se han unido horas después una cuadrilla helitransportada, dos cuadrillas terrestres, un bulldozer y una dotación de bomberos de la Diputación de Burgos.
Desde primera hora de la tarde, un técnico, dos agentes medioambientales, cuatro cuadrillas terrestres, tres autobombas, dos helicópteros y una cuadrilla helitransportada (ELIF), a la que se han unido dos aviones anfibio del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (MITECO) que se han desplazado hasta la zona, han trabajado en las labores de extinción del fuego dentro del operativo de lucha contra incendios forestales de Castilla y León (INFOCAL).
Durante la noche se prevé que aminore la velocidad del viento y que aumente la humedad relativa, por lo que el pronóstico es "bueno", según fuentes de la Junta, que informan que un agente medioambiental, una cuadrilla helitransportada y un camión autobomba seguirán realizando labores en el terreno estas próximas horas. Las labores del bulldozer, destacan estas mismas fuentes, han sido fundamentales para controlar las llamas debido a las dificultades encontradas por los medios aéreos para trabajar.
Incendio en Los Tornos. Las llamas de este jueves, de nuevo en el norte de la provincia, constatan que los incendios ya no son solo cosa de la primeravera y del verano. Aunque el que se originó el domingo en Balmaseda y saltó al Valle de Mena burgalés -afectando a más de 500 hectáreas- bajó ayer a nivel 0, este miércoles se registró otro en la localidad cántabra de Soba que hoy ha alcanzado la provincia de Burgos.
Medios de la Junta que ayer colaboraron con los de Cantabria trabajaban esta mañana en la Merindad de Montija. En el lugar había un agente medioambiental, una cuadrilla terrestre, una autobomba y dos helicópteros y dos cuadrillas helitransportadas, según detallaban fuentes oficiales.