La emoción por vivir el regreso del fútbol profesional a El Plantío quedó reflejada ayer por los cientos de aficionados que acudieron a las taquillas para retirar su entrada de cara al encuentro del domingo (22.00 horas) ante el Eibar. Muchos volverán a experimentar esa sensación que ya vivieron en 2001, pero para otros muchos será su primera vez, después de una larga y, en ocasiones penosa, travesía por el otro fútbol, el de Tercera y Segunda B.

Hubo quejas. Muchos abonados tuvieron que esperar hasta dos horas para adquirir su localidad, aunque al final la mayoría mostraban orgullosos su entrada, deseando que llegue el domingo, aunque sea a una hora tan extraña como las diez de la noche.

Debido a la pandemia y las restricciones ordenadas por las autoridades, en estas jornadas solo puede acudir a los estadios el 40% del aforo. En el caso del Burgos Club de Fútbol, ahora mismo en El Plantío hay casi 12.000 localidades, y la cifra de abonados que podrán ir al domingo al choque ante el Eibar es de 4.777 aficionados. En esta primera venta de entradas el club ha puesto a la venta 4.449, que corresponden a los abonados de la pasada campaña, que tenían preferencia.

En estas primeras horas, más de 3.100 abonados han retirado su localidad, ya sea en modo presencial o online. La venta de entradas seguirá hoy para estos 4.449 que renovaron su carnet. Si no retiran todas ellas, tendrán derecho a recibirlas el resto de abonados del Burgos hasta completar el aforo permitido de 4.777 espectadores.

(Más información de este tema y de toda la actualidad deportiva, en la edición de papel de hoy de Diario de Burgos)