El Real Madrid dio anoche un paso de gigante hacia el título con su victoria en El Sadar ante Osasuna (1-3), pero el gran protagonista del encuentro fue un burgalés, de Miranda de Ebro, que se hizo inmenso para 'secar' al Pichichi de LaLiga. Sergio Herrera detuvo dos penaltis a Karim Benzema en apenas ocho minutos y fue elegido mejor jugador del partido. "Sabía cuál era su zona de seguridad", desveló el meta tras el pitido final. Su técnico, Jagoba Arrasate, y su compañero Chimy Ávila se rindieron a la actuación de Herrera, un especialista bajo palos en los lanzamientos desde los once metros.

Sergio Herrera adivinó por dos veces la intención de Benzema y metió fuerte la manopla para desviar ambos disparos, rasos y a su derecha. "Cuando ante el Celta falló un penalti, el segundo lo tiró a su zona de seguridad. Por eso me he tirado ahí", explicó ante las cámaras de Movistar nada más acabar el encuentro.

"Nos vamos con la sensación de haberlo intentado hasta el final y haber tenido nuestras opciones", añadió Sergio Herrera, "contento" por su actuación, por la de su equipo y por el ambiente con la afición. 

En la misma línea se expresó Jacoba Arrasate. "Es una pena no haber podido sacar al menos un punto", dijo el técnico de Osasuna, que destacó la actuación de Sergio Herrera. "Estamos encantados de contar con él y es una suerte que tenga ese plus desde los once metros", agregó en la rueda de prensa posterior al choque.

Chimy Ávila, que cometió el primer penalti detenido por el meta mirandés tras una mano en el área, ensalzó a su compañero: "Sergio Herrera se salió. Parar dos penaltis al goleador de la liga no es fácil".

Pese a los dos lanzamientos errados por Benzema, el técnico del Real Madrid, Carlo Ancelotti, dejó claro quién tira los penaltis en el equipo blanco. "El próximo lo va a tirar él. Puede fallar, no pasa nada. Ha hecho un choque extraordinario y ha jugado por y para el equipo".