Paseo natural e ilustrado desde el sofá

ALMUDENA SANZ
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El periodista burgalés César Javier Palacios conduce la séptima temporada del programa de La 2 'El señor de los bosques', que combina interpretación del paisaje, periodismo y gastronomía

Palacios (d.) caminó con el actor Gorka Otxoa por el hayedo de Tejera Negra en la Sierra de Ayllón por la cara de Guadalajara.

Ser testigos del amor incondicional que se fragua entre un hongo y un alga en un liquen, descubrir que la retama es la primera planta que vuelve a brotar tras un incendio y que las cenizas son un potente fertilizante, aunque de acción lenta, caminar de la mano del escritor Juan Manuel de Prada y volver con él a su infancia, pisar la hojarasca y adentrarse en los secretos de la cantante Nena Daconte, chuparse los dedos tras comer un chuletón... El señor de los bosques invita a pasear por las arboledas que pueblan el territorio español con tiempo para el embeleso, el aprendizaje, la sorpresa y el buen comer, y sin abandonar el sofá ni la mantita del paisaje dominical. El periodista burgalés César Javier Palacios conduce la séptima temporada de este programa de La 2 de TVE, que abre una puerta al campo los domingos a las 19.30 horas. 

La mecánica resulta sencilla. Se trata de dar un paseo por un bosque junto a un personaje célebre. Actrices, escritores, músicos, periodistas. La caminata da pie a interpretar el paisaje, a acercarse a aspectos personales y profesionales del acompañante, a encontrarse con un especialista que arroja luz sobre una materia determinada (reforestación con dron, medición del bosque con un ForeStereo...) y a terminar con una merendola. Al final, se ponen todos el delantal con la chef Aizpea Oihaneder para elaborar una receta con productos de la zona o típica de allí. 

«Hay contenido, periodismo, entrevista, gastronomía, sostenibilidad y educación ambiental, viaje... Esta serie es un gran acierto porque permite acercarse desde muchos puntos diferentes e interesantes a la naturaleza, que es de lo que se trata», relata Palacios y destaca el ritmo pausado de cada capítulo, con tiempo para deleitarse con el paisaje y para interpretarlo: «Tenemos que salir de la imagen de Instagram y buscar los contenidos, que marcan la diferencia y el placer de descubrir. Cuando valoras algo es porque lo conoces». 

Y todo sin cansar al espectador. Cada capítulo dura media hora. Ya se han emitido tres, con la actriz Cristina Medina en Hoyo de Pinares (Ávila), el actor Gorka Otxoa en el Bosque de Matarredonda (Guadalajara) y el presentador Luis Larrodera en Camino de Espata, en los Pirineos aragoneses. Quedan por ver otros diez. Bosques de toda España, como las selvas de Oza (Huesca) e Irati (Navarra), Cenicientos (Madrid), Altube (Álava)... No hay ninguno de Burgos esta temporada. Todo llegará. Por esos parajes transitarán la actriz Bárbara Goenaga, el periodista deportivo Nico Abad o la presentadora de El condensador de fluzo, Raquel Martos. 

La producción de cada episodio se alarga. Antes de la grabación, que se hace en tiempo real, Palacios visita la arboleda por la que caminarán en busca de contenidos interesantes (una planta, una curiosidad, un hongo...). Estos determinan el recorrido, sin apenas guion, enriquecido por las preguntas del invitado, «que son las mismas que se puede hacer cualquiera desde su casa», que activan un diálogo «tremendamente natural», pese a todo el tinglado que los rodea, un imponente despliegue técnico de cámaras, drones, sonidistas... «Para mí es interesante porque no se trata de aprenderte un papel o forzar un personaje que no eres, sino que te piden que seas natural y que hagas algo que de repente te das cuenta de que puede llegar a mucha gente», enfatiza este encantado señor de los bosques.