El consultorio de Villalonquéjar reabrirá el 1 de febrero

C.M.
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Se han eliminado las humedades, mejorado la climatización y arreglado una de las puertas del edificio de las antiguas escuelas en el que está situado

Los vecinos recogieron firmas y protestaron frente a las instalaciones para que volviera el servicio. - Foto: Jesús J. Matías

Los vecinos de Villalonquéjar recuperarán el 1 de febrero los servicios del consultorio médico tras la decisión de su cierre. El Servicio Territorial de Sanidad ha dado el visto bueno para el uso de las instalaciones después de que el Ayuntamiento de Burgos, propietario del edificio, llevara a cabo las mejoras propuestas en el informe realizado por su técnicos en octubre del año pasado. 

La Asociación de Vecinos se muestra satisfecha y confía que en los próximos días regresen las consultas presenciales. «Tenemos el visto bueno de que el consultorio está apto para que los médicos trabajen en buenas condiciones y ahora solo queda que fijen el día en el que vuelven a pasar consulta aunque desde Atención Primaria nos han dicho que será inminente», señaló su presidente Javier Trascasa. 

Cabe recordar que el consultorio, que está en las antiguas escuelas, no reabrió tras la pandemia y en octubre del año pasado cuando ya pasó lo peor y retornaron las consultas presenciales los residentes en el barrio se sorprendieron cuando desde Atención Primaria se le advirtió de que las instalaciones «no reunían las condiciones» y tendrían que desplazarse hasta el consultorio de Quintanadueñas. 

Este hecho motivó que se iniciara una campaña de recogida de firmas contra esta decisión por el trastorno que supone desplazarse hasta una localidad a seis kilómetros para la que no existe transporte público, dado que las personas mayores no tienen vehículo propio y dependen de familiares o de otros vecinos para acudir a la cita.

La Gerencia de Atención Primaria respaldó su decisión en un informe de una técnico de Salud Pública. Las razones que se exponían eran que se trataba de un espacio compartido dentro de un edificio con otros usos y no permitía establecer un doble circuito de entrada y salida para los pacientes y tampoco contaba con una dependencia diferenciada para enfermería. 

Ante la polémica generada desde la Consejería de Sanidad estimaron que no era Atención Primaria la que tenía que realizar el informe sobre la idoneidad de las instalaciones sino el Servicio Territorial de Sanidad. Los técnicos de este organismo se pusieron manos a la obra y realizaron una visita a las dependencias y elaboraron un informe en el que las calificaron de «adecuadas» y en «buen estado de conservación» aunque necesitadas de algunas mejoras.

Entre ellas se citaba la eliminación de las humedades del cortavientos de la zona de entrada, la reparación de la abolladura o sustitución de la puerta del aseo y la retirada de los paneles informativos y la treintena de sillas que hay en la sala de enfermería, así como algunas mejoras en el sistema de climatización y en la limpieza. 

El Ayuntamiento de Burgos se puso manos a la obra al ser el propietario del edificio y durante estos meses ha llevado a cabo las reparaciones. Los técnicos han vuelto al inmueble y han comprobado que ya está en disposición de volver a prestar el servicio sanitario. Ahora Atención Primaria ha fijado para el martes 1 de febrero la vuelta de los facultativos de medicina y enfermería al consultorio de Villalonquéjar. 

La atención médica se prestaba dos días a la semana (martes y jueves) y la de enfermería una vez al mes. Villalonquéjar, Villatoro y Villafría funcionan para la atención médica como si fueran pueblos a pesar de haber dejado hace años esa condición. Tienen consultorio médico para la atención básica y para el resto de prestaciones acuden al centro de salud Rural Norte.