Los proyectos de vivienda nueva resisten a la incertidumbre

H.J.
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Hasta septiembre, en Burgos se habían visado 870 pisos a punto de iniciar su ejecución frente a los 689 del año anterior y 2020 acabará probablemente como el segundo mejor ejercicio de la década, a expensas de cómo evolucione la crisis

Las promociones de mayor tamaño se concentran en el entorno de la antigua Coprasa y el S-4 - Foto: Luis López Araico

La construcción de nuevas viviendas no está sufriendo, al menos de momento, un efecto inmediato de la crisis económica que acompaña a la sanitaria. Aunque con ligeros matices dependiendo de las comarcas, en el conjunto de la provincia de Burgos se siguen concluyendo proyectos para la edificación y el año acabará como uno de los mejores de la última década.

Así lo reflejan los datos del Colegio de Arquitectos, donde registran los visados de estos proyectos, el paso previo al inicio de la edificación. Y según sus estadísticas, hasta el 30 de septiembre ya se habían presentado expedientes para la construcción de 870 viviendas frente a las 689 del año pasado en estas mismas fechas y a las 653 de 2018.

En esos dos ejercicios precedentes sucedió que el último trimestre presentó unos datos espectaculares, por encima de las 300 viviendas, y por eso figuran todavía por delante de este año. Pero a poco que el sector siga animado de aquí al 31 de diciembre este podría ser el segundo o incluso el mejor año desde 2010, hasta donde se remontan los registros del Colegio.

Para lograrlo sería necesario que se visasen proyectos para alrededor de 200 viviendas, algo nada descabellado a la vista de los picos puntuales de trimestres anteriores pero que en el órgano colegial no se atreven a pronosticar. Su presidente, Javier Achirica, prefiere optar por la prudencia porque "la estimación anual de antes de la pandemia pensábamos que sería similar al año anterior, con ligeras bajadas o subidas. Ahora las reglas del juego han cambiado y si antes vivíamos en incertidumbre todavía ahora más, no podemos aventurar nada por esas fluctuaciones que no se pueden prever".

Esa montaña rusa de datos positivos y no tanto se detecta a poco que se analice la estadística de visados. La capital burgalesa, por ejemplo, crece ligeramente respecto al trimestre anterior. Se han presentado proyectos para 126 viviendas, principalmente repartidas en las zonas de expansión de la antigua Coprasa y el S-4, con promociones de unas 30 o 40 viviendas de media.

El alfoz de Burgos, por su parte, sigue muy estancado pero es una tendencia que ya no sorprende a lo largo de los últimos años, lo mismo que ocurre con Miranda de Ebro. Por población, sin embargo, esta última es un caso verdaderamente preocupante tal y como admite Achirica.

Preocupa Miranda. Hace cuatro años, concretamente desde diciembre de 2016, que la segunda localidad burgalesa pese a sus más de 35.000 habitantes censados no prevé la construcción de más de 30 viviendas nuevas en un año. En el último trimestre solo se ha presentado un proyecto unifamiliar y en el anterior únicamente fueron 3. Es una tendencia desoladora.

Por el contrario Aranda, con muy pocos menos vecinos que Miranda, destaca de vez en cuando con promociones de 90 o 100 pisos como las que se presentaron a principios de año, impulsada por un Plan Regional de Viviendas de Protección que está alimentando los datos de los últimos años.

En cualquier caso, "lo más importante" a juicio del presidente de los arquitectos, sobre todo pensando en su colectivo, "es que en el resto de la provincia hay un mantenimiento constante de la actividad". En efecto, el mundo rural presenta una tendencia muy estable que ha generado más de 200 viviendas nuevas a lo largo de los últimos años. "Así el trabajo está más repartido porque hay muchas viviendas unifamiliares que, aunque no supongan una gran inversión como las promociones colectivas de la ciudad, generan actividad".

Más allá de las fluctuaciones trimestrales, la tendencia de los últimos años refleja que los peores momentos de la anterior crisis económica están por fortuna lejanos. En 2012 o 2013 "era impensable ver proyectos de 50 viviendas", apunta el presidente del Colegio de Arquitectos, "y llegó un momento en que era motivo de celebración". De ahí que el global del año no pasase de las 300 o 400 nuevas viviendas, cuando ahora se acercará o superará el millar.