La historia de Roa hecha teatro

A. del Campo
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La asociación el Empecinado escenifica la villa medieval para financiar un antiguo mapa raudense que donará al pueblo

Ensayo de la obra ‘El Fuero de Roa de 1143’ que se representará este sábado. - Foto: DB

Roa de Duero es uno de los pueblos de la Ribera con mayor historia y sus vecinos están empeñados en que nadie lo olvide. Esta vez es la asociación cultural Juan Martín El Empecinado la que viajará atrás en el tiempo para narrar el pasado de la villa. Lo hará a través del teatro con la obra El Fuero de Roa de 1143, que se representará este sábado 20 de abril a las 20.30 horas en el centro cívico raudense. El precio será de cinco euros pero lo realmente valioso de la entrada es que valdrá para financiar un mural de cerámica de tres por dos metros que se donará al municipio para decorar sus calles. El mural representa el fuero de Roa a través de un antiguo mapa de la villa y en la asociación El Empecinado esperan que el Ayuntamiento acepte colocarlo en el paseo del Espolón.

La obra teatral es fruto del trabajo del colectivo cultural raudense. Como señala su presidente, Satur Rioja, él mismo realiza un primer boceto de la representación, se documenta, escribe el texto, crea los personajes, y luego, entre todos, la mejoran. La historia narrada irá, según explica el mismo Satur Rioja, desde el inicio de la repoblación (año 911), pasará por la construcción de la Colegiata (1083) y finalizará en el Fuero de Roa (1143). Las diferentes épocas estarán conectadas por la figura del trovador.

El objetivo de la representación, además de financiar el citado mural, es que los vecinos y visitantes conozcan un poco mejor la historia de Roa. «Somos hijos de algo y de alguien y parece que se nos olvida. Hay que respetar la historia y verla con la perspectiva de la época. No hay que distorsionarla con juicios actuales», declara Satur García. 

El hito que quiere conmemorar la representación teatral es, como su propio nombre indica, el Fuero de Roa. Este era un documento que recogía una serie de leyes, derechos y privilegios otorgados por la corona para combatir la despoblación. Satur Rioja puntualiza que «la historia se repite» porque «las tierras de Castilla tenían entonces el mismo problema que hay ahora: la despoblación». La diferencia radica en que antaño las causas fueron bien distintas: la sangría demográfica provocada por las guerras. «Es comparable de alguna forma con la España Vaciada, que esta vacía porque alguien la ha vaciado», insiste Satur Rioja. 

En aquella época medieval, las soluciones que se pusieron para atraer habitantes fueron muy distintas de las que se podrían aplicar hoy. Como señala Satur Rioja, se otorgaron de forma gratuita tierras propias del rey a los nuevos pobladores, se cedían las competencias recaudatorias solo al concejo, de esta forma se eliminaba el feudalismo: la servidumbre a los nobles... Además, el propio pueblo pasaba a estar representado en el concejo (sistema de organización municipal).  El Fuero de Roa no fue exclusivo y se creó a la vez que otros 42 que dieron lugar a otras tantas comunidades de villa y tierra.