La Policía Local de Burgos tuvo una madrugada entretenida. Además de acudir a la calle La Puebla para detener a un varón que estaba alterando el orden público, los agentes interceptaron a dos conductoras que circulaban bajo los efectos de bebidas alcohólicas, una por la calle Alfonso XI y la otra por Severo Ochoa.

Una patrulla que estaba en las proximidades de la calle Vitoria observó sobre las 02.10 horas de la madrugada la conducción negligente de un vehículo que circulaba a velocidad inadecuada. Tras dar el alto al turismo y entrevistar a la conductora, esta se sometió a la pertinente prueba de alcoholemia, en la que dio positivo, por lo que su coche fue retirado por la grúa municipal. 

Poco más de una hora y media más tarde, otra patrulla interceptaba en la calle Alfonso XI a otro vehículo y la unidad de Atestados realizó la prueba de alcoholemia a su conductora, que superó el límite de alcohol para ponerse al volante, por lo que se le instruyen diligencias al juzgado.

Mientras se esperaba a la llegada del servicio de grúa, otra mujer que circulaba como ocupante en el vehículo recriminó la actuación de los agentes y les insultó, por lo que fue identificada e informada de la correspondiente denuncia por infracción a la Ley 4/2015, por faltas de respeto y consideración a los agentes.