Estafan 3.000 euros a un burgalés con el 'virus informático'

DB
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La Policía Nacional alerta de nuevos engaños mediante este método, en el que una persona, haciéndose pasar por un técnico informático, accede a los datos y claves bancarias de la víctima para sustraer elevadas cantidades de dinero

Estafan 3.000 euros a un burgalés con el 'virus informático' - Foto: POLICÍA NACIONAL DE BURGOS.

La Policía Nacional alerta nuevamente en Burgos de la estafa del virus informático después del robo, la semana pasada, de casi 3.000 euros a un burgalés mediante esta modalidad de engaño, en la que los delincuentes acceden a los datos y claves bancarias de sus víctimas haciéndose pasar por un técnico informático. 

La semana pasada un vecino de Burgos fue víctima de esta modalidad delictiva. Recibió una llamada telefónica por parte de un hombre que se identificaba como técnico de una conocida empresa informática, comunicándole que habían detectado en su ordenador ataques producidos por distintos virus que, de no solucionarlos, le podían crear muchos problemas.

Seguidamente el supuesto técnico le ofrecía la solución por 50 euros y le indicaba los pasos a seguir porque, según él, necesitaba chequear el ordenador y tener su control. Para el pago, la víctima, siguiendo las instrucciones recibidas, facilitó número y clave de su tarjeta de crédito.

De esta manera y, una vez finalizó la llamada, la víctima se percató de varias transferencias en su cuenta bancaria por valor de 2.985 euros. También habían transferido 8.500 euros de otra cuenta del perjudicado, si bien esta última cantidad aún no estaba autorizada por la entidad y pudo anular la operación.

Los estafadores de este tipo de delitos cuentan con experiencia y capacidad de persuasión suficiente para conseguir que sus víctimas sigan sus instrucciones. Un ejemplo es que les facilitan datos estrictamente personales con el peligro que ello supone, por lo que la Policía Nacional advierte de que jamás se deben facilitar datos y claves bancarias a desconocidos.Siempre se debe desconfiar de alguien que lo solicite, ya que son enteramente de carácter personal y privado y, por consiguiente, sólo los debe conocer el interesado.