La Escuela de Arte trabaja en un máster de Diseño de Moda

B.G.R.
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Sería el primero que oferta un centro público de Castilla y León para dar continuidad a los estudios de grado en este campo. Por el momento, no se plantea ampliar la oferta de ciclos

El centro se encuentra ubicado en la calle Sahagún, junto a la Facultad de Educación. - Foto: Alberto Rodrigo

Una vez culminado el proceso de renovación de ciclos formativos, con la implantación de cuatro nuevos estudios desde 2019, la Escuela de Arte y Diseño de Burgos apuesta por la especialización de sus enseñanzas. Concretamente, el centro ha comenzado a trabajar este curso que está a punto de terminar en el desarrollo de un máster de Diseño de Moda que dé continuidad al grado ofertado en la materia.

El director de la escuela, Alejandro Caballero, asegura que se trataría del primer posgrado impartido en un centro público de Castilla y León, además de que precisa que, tras los primeros avances de este año, se continuará con este objetivo el próximo para poder impartirlo en un plazo no demasiado largo.

Un margen de tiempo que permitirá también conocer las necesidades de espacios de la dotación, ubicada junto a la Facultad de Educación, debido a que en la actualidad «no tenemos capacidad de ampliación». De hecho, la Junta ha incluido estas instalaciones en el programa de reforma, mejora y sustitución de este verano para la adecuación de dos aulas que permitan dar cabida a los alumnos que pasan a segundo curso de Diseño de Producto y Animación, que se estrenaron el pasado septiembre.

La consolidación de estas enseñanzas, así como de las de Ilustración (puestas en marcha en el 2020-2021) es ahora el objetivo de la escuela después de que se haya confirmado la demanda de las de Fotografía, que arrancaron en el 2019-2020. Las preinscripciones en el primer proceso de admisión (habrá otro en julio y uno más en septiembre) anticipan la cobertura de las vacantes (30) en los estudios de nueva implantación. Ilustración están siendo el más solicitado, al haber recibido 31 peticiones de acceso hasta el momento, 16 el de Animación, diez el de Fotografía y cinco el de Diseño de Producto.

De igual forma el centro contabiliza 16 para el grado de Diseño de Moda y ocho para el de Artesanía y Complementos en Cuero. «Son muchas inscripciones para estas fechas», reconoce Caballero. Por el contrario, anuncia la desaparición del ciclo de Técnicas Escultóricas de Madera por falta de alumnado, ya que el próximo ejercicio solo seis estudiantes cursarán segundo.

Más demanda que oferta. Otra de las enseñanzas que mantiene el tirón entre los jóvenes es el Bachillerato de Artes. La oferta se amplió a un cuarto grupo hace dos cursos para atender la demanda recibida, pasando de 85 a 110 plazas. Para el próximo, el centro ha recibido 104 solicitudes, si bien tan solo accederán a primero 96 alumnos debido a que debe reservarse un cupo para repetidores. Este nivel educativo posobligatorio sufrirá algún cambio a partir del mes de septiembre con la implantación de la Lomloe en los cursos impares.

Caballero hace referencia a las variaciones en el currículo, desapareciendo asignaturas como la de Fundamentos del Arte, que se sustituye por otras alternativas como Proyectos de Diseño, que pueden «acercar más al alumno» a dicho campo de estudio.  Otra de las novedades de la nueva Ley de Educación es la división del Bachillerato de Artes en dos modalidades: Artes Plásticas, Imagen y diseño, que es la especialidad del centro educativo, y Música y Artes Escénicas. 

En lo que se refiere a este último, pensado para alumnos que cursan enseñanzas profesionales de música o danza, el director de la escuela incide en que la dotación no tiene capacidad para acoger dicha especialidad. Se trata de una cuestión que ya se ha puesto encima de la mesa pero sobre la que aún no se ha tomado ninguna decisión.