El Aparejadores echa a andar a falta de detalles

ÁLVAR ORTEGA
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El Recoletas Burgos Universidad de Burgos espera dos fichajes más para dar por cerrado un equipo que tendrá 29 fichas

Primera sesión de entrenamiento del Recoletas Burgos Universidad de Burgos en San Amaro. - Foto: Jesús J. Matías

El Recoletas Burgos Universidad de Burgos ya cuenta con 27 jugadores confirmados después de la gran cantidad de renovaciones conseguidas y una serie de refuerzos, la mayoría de ellos nacionales, que ya perfilan la plantilla de la temporada 2022/23, que arrancó ayer con la primera sesión de entrenamiento. El club gualdinegro confirmó este lunes las dos últimas renovaciones (Johann Wagenaar y Rubén Sanz) y está a la espera de anunciar el fichaje de un primera línea que está ya firmado. Al margen de estas tres operaciones, solo restaría la contratación de un último primera línea debido a las inesperadas y repentinas marchas de dos jugadores importantes como eran Fran Alonso y Mattius Pisapia. El primero porque desea probar suerte en otro proyecto y el segundo porque ha abandonado el profesionalismo a pesar de confirmar su continuidad a principios del verano.

Esta baja por partida doble trastocó los planes iniciales del club burgalés, que ha tenido que acudir de nuevo al mercado de fichajes para estudiar una lista de nombres que cada vez es más reducida. Tanto Alonso como Pisapia ocupaban plaza como jugadores de formación, por ello su marcha es especialmente dolorosa, ya que los sustitutos deben disponer de la misma consideración para luego el técnico no tenga problemas a la hora de alinear a nueve jugadores de formación, tal y como dictamina una regla que cada vez es más exigente, pues el curso pasado la cifra era solo de siete.

Es por ello que cada vez las plantillas de los clubes de la División de Honor poseen más jugadores de origen nacional o que llevan residiendo y jugando en España desde hace varios años. Es el caso del propio Aparejadores, que se ha reforzado con cinco jugadores nacionales (Álex Suárez, Arturo Méndez, Urko Zumeta, Noah Canepa e Ignacio Caini) y solo con dos extranjeros, los argentinos Santiago Gramajo y Estanislao Bay. El primero de ellos es un refuerzo para la primera línea, mientras el segundo llega para sustituir al chileno Nicolás Herreros en la posición de medio melé, donde compartirá minutos con Nicolás Rocaries.

Johan Wagenaar. El Recoletas Burgos Universidad de Burgos confirmó ayer la continuidad del sudafricano Johan Wagenaar, uno de los capitanes de un vestuario al que llegó en 2016 y del que se ha convertido en una figura muy importante.

Con más de 100 partidos como miembro del club burgalés a sus espaldas, cifra que alcanzó ya hace dos temporadas, Johan Wagenaar, que llegó de la mano de David Martín, es uno de los hombres que cierra una plantilla que, aunque no es tan larga como la de otros equipos con mayor presupuesto y que aspiran a conseguir el campeonato liguero, satisface a José García y a su cuerpo técnico, que ya dirigieron ayer la primera sesión de la pretemporada. El inicio de liga no será hasta el 2 de octubre, frente al Club de Rugby La Vila.