Lou Matilla

Déjame que te cuente

Lou Matilla


La cuesta

04/01/2023

Por fin estamos dando los últimos coletazos a estas fiestas que algunos habrán disfrutado a lo grande (como deben disfrutarse todas las fiestas) y otros sin embargo las habrán vivido de manera más austera y moderada. Cualquiera de las formas resulta válida si se trata de felicidad, eso es lo que más importa. 

Pero no olvidemos que mañana es el turno de los niños y de su gran día porque tendrá lugar ¡La Gran Cabalgata! Será una tarde en la que podrán ver de cerca a sus Majestades cabalgando a lomos de sus enormes camellos y podrán por fin hacer realidad sus pequeños sueños, esos que llevan esperando ya muchas semanas.

Será un año más, la noche de los zapatos bajo el árbol, la noche de no dormir, del agua y las galletas para que los Reyes y sus jorobados puedan seguir su camino repartiendo regalos hacia las casas del resto de niños sin perder tiempo, fuerza ni ritmo. Será como siempre una noche muy especial en la que todos los enanos de la casa harán madrugar sin miramientos a hermanos, padres, tíos y abuelos. Habrá llegado entonces el ansiado 6 de enero, el día más ilusionante para los pequeños (y no tan pequeños). 

Sin embargo, yo hoy quiero acordarme, justo antes de que todo vuelva a la rutina en pocas horas, de los otros protagonistas que han tenido las fiestas: de aquellos que habéis salido de casa el 20 de diciembre y no habéis encontrado la puerta todavía, de aquellos que habéis acabado cada noche la fiesta desayunando churros y poniendo las calles cada frío amanecer, de los que le habéis pagado un trineo nuevo a Santa con tantos y tantos regalos que habéis comprado (se os ha ido un poquito de las manos), de los pobres repartidores de Amazon que habéis dejado deslomados subiendo y bajando paquetes todos los días de la semana como si no hubiese un mañana.

De los que os habéis gastado un pastón en un traje carísimo para ir más elegantes que el cuñado en Nochevieja a casa de la suegra y al llegar os habéis encontrado que el atuendo del contrincante era un jersey con el gordo de Santa intentando meter el culo por una chimenea...

A todos vosotros, solo deciros que… ¡¡¡vais a flipar con la cuesta de enero!!!

ARCHIVADO EN: Nochevieja, Amazon