Para encontrar empleo hay que saber buscarlo y venderse, pero no todas las personas tienen los conocimientos y las herramientas para hacerlo. Con el objetivo de ayudar a este tipo de población, desde la Fundación Cauce llevan cinco años desarrollando un programa de inserción laboral en Burgos y provincia, en el que han atendido ya a 900 personas, de las cuáles 120 han encontrado empleo. Ana María Rodríguez, de Villasandino, es una de ellas. Esta localidad, junto a Sasamón y Melgar, todas en la comarca de Odra Pisuerga, han sido las primeras fuera de la capital a las que han llevado su iniciativa, una propuesta que quieren ir acercando a más pueblos «no solo para ayudar a las personas a nivel laboral, sino también para cubrir sus necesidades básicas y darles herramientas que favorezcan su autonomía», explican desde la Fundación.

En el caso de esta mujer su incorporación al mundo laboral fue prácticamente inmediata. «Dos o tres días después de entregar el curriculum ya estaba trabajando», comenta Ana María, que lleva tres años empleada en Senior, prestando ayuda a domicilio a personas mayores de pueblos como Melgar, Castrojeriz o Sasamón. «Un día hago 90 kilómetros y otro 120, pero estoy contenta con el empleo, voy donde me necesitan», asegura.

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