La memoria rescatada de Itero del Castillo

I.P.
-

Marisa Amor y Fernando González escriben 'Itero del Castillo. Historia, patrimonio, actualidad y futuro', con el propósito de que se conozca el pueblo «para amarlo y conservarlo»

Marisa (segunda por la izquierda) y Fernando (detrás de la mesa con chaleco), rodeados de autoridades locales y comarcales el día de la presentación del libro. - Foto: DB

Lo que no se conoce no se ama y, sobre todo, no se conserva. Con esa intención de plasmar la historia pasada y reciente, los acontecimientos más relevantes que se suceden día a día y las vidas, a veces, no tan anodinas como creemos de las gentes que habitan el pueblo, se han unido en un proyecto común dos enamorados de Itero, María Luisa Amor, a quien no le cuesta querer al pueblo porque nació en él, y Fernando González, que ha sabido con el paso de los años arraigarse en él. De éste surgió la idea de escribir un libro que recogiera la memoria de Itero, embarcando en el proyecto a Marisa porque ésta había investigado el arte y patrimonio de su pueblo, llevada por su propia vocación, ya que es profesora de Historia y ha trabajado en catalogación de obras de arte, además de que en su día impulsó la página web de la localidad, con lo que en su poder tenía ya mucha información y documentación que ahora le ha servido para el libro, al que han titulado Itero del Castillo. Historia, patrimonio, actualidad y futuro, que ya está en las estanterías de todas las casas del pueblo, donde aún resuenan los ecos del acto de presentación del mismo, un momento de orgullo compartido por los autores, el Ayuntamiento y los vecinos. 

Se estructura en 6 capítulos, dos se refieren a la historia y el patrimonio y llevan la firma de Amor y los otros 4 han sido relatados por González. Éste se centra en dar a conocer los datos básicos del pueblo, destacando sus paisajes, el escudo y bandera, la geología, recurso hídricos o la fauna y flora, así como en recopilar a los pregoneros de las fiestas de San Cristóbal desde el año 2007, y los recuerdos más recientes desde la postguerra que ayudan  a comprender formas de vida y transmitirlos a las nuevas generaciones.  

Por su parte, Marisa desgrana la historia y se detiene en el patrimonio de Itero, dominado por el castillo y la iglesia. Asegura que escribir algo así era algo que siempre había querido hacer, «pero lo iba retrasando hasta la jubilación», explica, agradeciendo la oportunidad a Fernando. Reconoce que ha sido una labor ardua, porque aunque tenía documentación, lo cierto es que no hay nada conservado en el pueblo, sí acaso ha echado mano de un documento que está en el Archivo de Simancas sobre una carta de privilegio desde el siglo XIV, que confirma a Itero como villa, que ella misma tradujo en un trabajo de la carrera. Marisa destaca el Pisuerga y el Camino de Santiago como los ejes vertebradores de su historia, que se remonta al siglo X, o al menos, dice, es cuando datan los escritos de la repoblación de la zona. En cuanto al patrimonio, en Itero, como en otros pueblos, se dejó de valorar y mucho se ha deteriorado. Lo califica de «humilde», pero «es nuestra seña de identidad». El castillo, la iglesia, la ermita y el puente -que une dos fronteras, el reino de Castilla y el Condado de León-, y es paso de peregrinos desde la Edad Media sería el patrimonio con mayúscula, pero también destaca el de minúsculas, las casas, pajares, bodegas... «que se tendría que haber valorado más para conservarlo», afirma.