Muchos de los presentes este domingo en El Plantío recordarán aquella tarde en Linares en la que el Burgos CF logró un triunfo que sellaba la permanencia en Segunda B tras una aciaga temporada 2016-2017. No tantos, probablemente, se acuerdan de que el autor del gol que abrió el marcador ese 28 de mayo fue Diego Suárez.  

El delantero maño apenas aportó dos tantos ese curso, pero uno sigue muy presente en la retina de muchos seguidores blanquinegros, de los 300 que viajaron más de 14 horas en bus para alentar a su equipo y de los que lo vimos a distancia por televisión. 

El mencionado Diego Suárez saltó al césped de El Plantío este domingo con el ‘17’ del Tudelano a la espalda y como aquel agónico curso pasó bastante desapercibido ante un Burgos CF que ya mira para arriba. Cuatro victorias seguidas, nueve goles a favor y ninguno en contra. ¡12 puntos de 12 posibles en febrero! Y aún queda Osasuna B este sábado para poner la guinda a un mes que ha devuelto la ilusión al burgalesismo. 

'Está entrando en territorio blanquinegro. Aquí no se rinde nadie', rezaba el cartel creado la aciaga temporada 2016-2017. - Foto: @Burgos_CF

‘¡Sí se puede!’, se escuchó brevemente en una parte de la grada en el minuto 88. Antes, ese mismo sector había mostrado una pancarta con el lema: ‘Un guerrero jamás se rinde’, en homenaje al que fuera presidente de la Asociación de Afectados por la Esclerosis Lateral Amiotrófica (ELA) de Castilla y León, Jesús Gómez, y a todas las víctimas de esta enfermedad. 

Aquella consigna me recordó a otra similar plasmada en carteles pegados alrededor del estadio y difundida también en redes sociales que se hizo viral entre la hinchada burgalesa aquel citado año de los tres entrenadores (Paco Fernández, Manix Mandiola y Nacho Fernández) y de la salvación en Linarejos. ‘Está entrando en terreno blanquinegro. Aquí no se rinde nadie’.  

Esta vez el objetivo es otro. Queda mucha liga todavía...