Las etapas de la Vuelta a Burgos están ya perfectamente definidas. La organización ha ido desgranando el recorrido de la ronda en los últimos días y este miércoles confirmó la última jornada que quedaba por desvelar, la cuarta jornada denominada ‘Ribera del Duero’ y que comenzará en las Bodegas Nabal de Gumiel de Izán y concluirá en Roa de Duero. Tendrá 164 kilómetros y un trazado plano en el que no habrá ninguna dificultad montañosa.

La ronda burgalesa mantendrá el guión de los últimos años y su recorrido es muy similar al de anteriores ediciones. Tendrá una longitud de 797 kilómetros, en los que el pelotón superará 2 puertos de categoría Especial, 1 de Primera y 9 de Tercera. Las dos jornadas que decidirán serán las de Picón Blanco, que llegará el tercer día, y Las Lagunas, ascensión que será la encargada de cerrar la competición.

Es una carrera para escaladores y será más que complicado que un corredor de otro perfil pueda aspirar al maillot morado definitivo.

Los grandes nombres serán muchos y entre ellos hay consumados ‘grimpeurs’, por lo que la batalla puede ser notable tanto en las rampas del duro puerto de Espinosa, como en la etapa serrana de la quinta jornada.

La capital tendrá su protagonismo en la primera jornada con la ya habitual llegada al Castillo. Se trata de un final complicado en el que la colocación será fundamental y en el que los favoritos no se deben descuidar si no quieren llevarse un disgusto.

La primera etapa llana será la segunda y recorrerá las Cuatro Villas de Amaya. Se iniciará en Castrojeriz y concluirá en Villadiego. Se prevé una llegada masiva y será también una buena oportunidad para las escapadas. 

El primer día clave llegará el 30 de agosto con la ascensión al Picón Blanco. Los favoritos deberán dar un paso adelante y supondrá la primera gran criba. Será un recorrido sinuoso con cuatro puertos de Tercera antes de la subida final, por lo que ha sido designada por la organización como la etapa reina.

Los rodadores y los velocistas volverán a tener una nueva oportunidad en la cuarta jornada entre Gumiel de Izán y Roa.

Y el desenlace llegará en Las Lagunas. A la ascensión final se llegará por el Collado de Neila, lo que añadirá dureza al trazado y hará más complicados los últimos kilómetros de la jornada.