Van a tardar un tiempo en recuperarse los juzgados de Burgos de la huelga que los letrados de la administración de justicia iniciaron el pasado 24 de enero y que duró hasta el martes. Dos meses en los que la jurisdicción penal ha sido la más afectada. Unos órganos que, por cierto, estaban ya bastante colapsados y fue necesario reforzarlos con tres magistrados. El parón ha suspendido numerosos señalamientos programados para estas semanas y también afectará a otros fijados de aquí a mayo, más o menos. Esto obligará a retrasarlos a 2024.
Cristina Rubio, de la Unión Progresista de Letrados de la Administración de Justicia (UPSJ), cifra entre 430 y 450 los señalamientos para juicio y declaraciones en instrucción suspendidas durante la huelga. De ellas, completa, «el 75% corresponde a la jurisdicción penal». A esos hay que sumar los que se reprogramarán porque en este tipo no se han practicado determinadas diligencias, cuestiones que se plantearán cuando lleguen a sala. Además, hay ahora mismo 1.542 asuntos retenidos en las bandejas de envío que «se irán remitiendo a los órganos de tramitación entra abril y mayo».
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