Boxeadores en el Far West

I.M.L.
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El escritor con raíces ribereñas Robert Hernando publica la segunda entrega de su trilogía Gladius, en la que se cuela como escenario el cementerio de Sad Hill, aprovechando el tirón de sus libros para dar a conocer la comarca

Robert Hernando muestra satisfecho la portada de la segunda entrega de las andanzas de Aitor Tresor en los bajos fondos. - Foto: DB

Algo tan alejado en el tiempo como un teatro romano, léase el de Clunia, y un escenario de una película del oeste, léase Sad Hill, tienen dos cosas en común: Una, que ambos enclaves están en Burgos, y dos, que sirven de trasfondo para sendos capítulos de las aventuras de Gladius, la saga del escritor Robert Hernando, que ya va por su segunda entrega. Si en la primera novela el boxeador Aitor Tresor, su protagonista, peleaba en el recuperado enclave del siglo I d.C., la imaginación del autor catalán, con fuertes vínculos familiares con la comarca ribereña, le llevan al paraje natural donde se desarrolla el famoso trielo con el que culmina El bueno, el feo y el malo. «Yo siempre intento llevar el agua a mi terreno, estoy muy arraigado a todo lo que es la provincia de Burgos y por eso quise hacer un homenaje a Clunia y esta segunda parte a Sad Hill, en un capítulo que creo que es uno de los mejores del libro», confirma Robert Hernando, con la segunda edición de Gladius II en sus manos ya.

En medio de una trama de peleas clandestinas de gladiadores en pleno siglo XXI, ha aprovechado para hacer un homenaje a su tierra y a Sergio Leone. «Cuentan que Leone lo que quiso interpretar con un cementerio circular era precisamente un circo de gladiadores como el coliseo romano, ellos lo que hacen es hacer realidad el sueño de Leone cuando imaginaba un coso romano en Sad Hill», explica la justificación de utilizar este enclave cinematográfico recuperado por la asociación homónima para desarrollar allí un entrenamiento entre tres de estos gladiadores clandestinos y modernos.

Inmerso en la promoción de esta novela, que le llevó incluso a firmar ejemplares en Sant Jordi en Barcelona, Hernando se muestra orgulloso de contribuir a dar a conocer las joyas patrimoniales de la zona con sus novelas. «Tengo lectores que han conocido Clunia gracias a mi libro, y me hace ilusión que, con mi pequeño granito de arena, haya gente que decida acercarse a la provincia para conocer cosas porque el libro les despierte esa curiosidad», apunta humilde, siguiendo la estela de trilogías que han contribuido a incrementar las visitas a enclaves como el valle del Baztán o la ciudad de Vitoria.

Los que ya han conocido esta segunda entrega de las luchas de Aitor Tresor y «su contradicción porque, por un lado, sabe que está haciendo mal, que no es ético, entro ahí por una deuda hipotecaria; pero, por otra, ahora se siente un gladiador», apunta Hernando como trasfondo personal del protagonista de Gladius, le trasladan a su autor que «les gusta más que la primera entrega porque hay escenas muy visuales, muy de cine». Mientras sigue con la preparación de lo que quiere que sea la tercera entrega de esta saga, no abandona el sueño de que se pueda llevar al terreno audiovisual. «Hay productoras que han estudiado el proyecto, pero sería una serie cara porque tiene mucho escenario en exteriores, aunque no está la puerta cerrada», confía el autor, que incluso se anima a apuntar nombre como los de Mario Casas, Raúl Arévalo o Javier Rey para encarnar al protagonista de la historia.