La implantación del nuevo contrato de basuras que traerá consigo la recogida 'puerta a puerta' de los residuos asimilables a domésticos en los polígonos industriales ha generado una notable inquietud en el tejido empresarial, que mira con recelo la intención de la Concejalía de Medio Ambiente de retirar los cientos de contenedores que hay diseminados a lo largo y ancho de estos rincones de la ciudad.

El concejal Josué Temiño defiende que lo que se pretende con el 'puerta a puerta' es, además de dar un giro al modelo tradicional, acabar con aquellas malas prácticas de algunas empresas que utilizan los contenedores que hay en la vía pública para arrojar allí desperdicios que deberían de acabar en un punto limpio o ser tratados por parte de un gestor autorizado. Porque aunque no es lo habitual, tampoco es excepcional que la empresa que se encarga de la recogida de residuos se encuentre con que se han depositado baterías de coche, neumáticos, escombros, mobiliario...

De esta forma, el Ayuntamiento de Burgos quiere que los negocios se «responsabilicen» de los desechos que generan y que aquellos que deben de ser tratados de una forma especial no terminen en el vertedero.

El presidente de la Asociación del Polígono Industrial de Burgos Este, Fernando de Santiago, reconoce una cierta «preocupación» tras las dos reuniones que ha mantenido con el Ayuntamiento ya que el sistema que se propone «suena muy bien, pero tiene que estar muy bien engrasado». 

Entre otras cosas, De Santiago defiende que debe de tener en cuenta la enorme casuística que se da en estas zonas. Lugares en los que, tal y como recuerda, hay grandes empresas que no tienen problemas en poder tener en el interior de sus instalaciones los contenedores que se les van a recoger, pero donde hay otras donde no hay espacio. Fundamentalmente, aquellas donde hay naves nido, donde trabajan negocios del sector terciario...

Recuerda De Santiago que los polígonos industriales también son visitados por personas de fuera de Burgos, como los transportistas, que utilizan los contenedores para arrojar algunos desperdicios.

La secretaria general de la Confederación de Asociaciones Empresariales (FAE), Emiliana Molero, se muestra también con mucha cautela y a la espera de que por parte del Ayuntamiento se les facilite más información sobre este nuevo sistema.

La idea del concejal de Medio Ambiente es pactar con los empresarios unos plazos para la retirada definitiva de los contenedores de la vía pública. Es algo que se quiere hacer, pero también sin prisas y de tal manera que a los negocios no les pille con el pie cambiado y de la noche a la mañana.

El objetivo es reducir los residuos que lleguen al vertedero y eso supondrá un esfuerzo.