Diciembre siempre ha sido pródigo en noticias. No solo porque toca hacer balance del año a punto de terminar, cambiar leyes, aprobar presupuestos o para anunciar buenaventuras para la próxima añada, más con elecciones a la vista. Mañana se cumplirán 10 años desde que los propietarios de la nuclear de Garoña decidieron dejar de producir electricidad para evitar los nuevos impuestos aprobados por el Gobierno. Tal día como hoy de hace 32 años el Archivo Municipal de Burgos estrenó su nueva sede en el Palacio de Castilfalé, ahora en fase de crecimiento. En diciembre de hace cinco años fueron detenidos tres jugadores de la Arandina por presuntos abusos sexuales a una menor. Más atrás, en 1970, en tiempos de Franco, Burgos fue foco de la actualidad internacional con motivo del consejo de guerra que se desarrolló en el Gobierno Militar contra 16 activistas de ETA. Hace 22 años en el último mes del año el Ministerio de Defensa anunció el cierre del Hospital Militar de Burgos, hace 37 comenzó a funcionar el nuevo Hospital Provincial Divino Valles, y durante varios diciembres el Hospital San Juan de Dios ha venido anunciando su muerte y resurrección. El 12 de diciembre de 2008 Burgos estrenó desvío y la nueva estación del ferrocarril y, por no hacer extenso el relato, en ese mes de hace 35 años Aznar compensó a Burgos con el TSJ tras decidir que Valladolid se quedara con las sedes definitivas del parlamento y la Junta de Castilla y León.
Pero sin lugar a dudas la gran noticia de diciembre sigue siendo la del sorteo de la lotería de Navidad. Noticia permanente desde 1812, solo interrumpida en los dos primeros años de la Guerra Civil, que ha conseguido resistir a las pandemias. Con un gordo que se ha dejado caer en esta provincia en 6 ocasiones, la primera en 1862 y la última en 2018, en el que los burgaleses lideramos, tras los sorianos, el gasto en décimos por habitante. Un sorteo extraordinario y este año muy especial para el que esto escribe puesto que después de más de cuarenta años me libro de cubrirlo informativamente, entrevistando a loteros o a ganadores de pedreas o de premios más suculentos. Así que este año me toca. Me toca seguir a los niños de San Ildefonso por la radio, la tele o los medios digitales.