Mientras los vecinos del Casco Histórico Alto reclaman al Ayuntamiento una solución a los problemas de aparcamiento, hasta el punto de que se llegó a plantear incluso la implantación de la zona azul, la Junta de Gobierno Local aprobaba ayer el proyecto para la reurbanización de cinco calles de este entorno (Tahonas, San Miguel,Subida de San Miguel, Consulado y Camino del Gallego), en el que se contempla la supresión de alrededor de 70 plazas de aparcamiento tras una inversión para acondicionar la zona de alrededor de 2,6 millones de euros.

En la rueda de prensa posterior a la Junta de Gobierno se produjo una confusión ya que el vicealcalde, Vicente Marañón, habló de que se peatonalizarían las calles Tahonas, San Miguel y el primer tramo de la calle San Francisco, pero no será exactamente así.

En la memoria del proyecto se refleja que lo que se hará en estas tres calles es una plataforma única, de tal forma que las aceras estarán a la misma altura que la calzada. Se permitirá la circulación de vehículos aunque la actuación conlleva «la eliminación del aparcamiento en el ámbito de las calles Tahonas, San Miguel y el tramo de actuación en la calle San Francisco» (que llega hasta las intersecciones con San Gil y Trinidad). A esto se suma la supresión de las plazas en una de las aceras de la Subida de San Miguel.

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