El ex futbolista y entrenador Luis Mezquita ha regresado a la primera línea de actividad esta temporada como director deportivo de la Arandina. Un proyecto que contempla como un reto ilusionante, pero que también analiza desde una perspectiva muy diferente a su etapa en otro de los grandes clubes de Castilla y León, la Cultural Leonesa.
Y es que, con ganas de que comience ya la liga para demostrar el nuevo potencial ribereño, el leonés asume que «las condiciones que teníamos en León eran completamente diferentes a éstas al tratarse de un proyecto que buscaba ascender a Segunda». Sin embargo, «dentro de las posibilidades y en concordancia con el entrenador, hemos procurado reemplazar las bajas que teníamos para modelar un perfil de equipo acorde a las características que el míster pretendía».
Hecho positivo que ha permitido a la plantilla «acoplarse» y hacer «una pretemporada aceptable con cinco victorias y un empate», pero que no por ello oculta para Mezquita la dificultad del trabajo realizado hasta la fecha. Así, según éste, lo más complicado del verano ha sido tener el club «prácticamente paralizado hasta el 20 de julio». Una situación que ha propiciado «un retraso considerable», y por la que «probablemente, alguna de las cosas que se debieran de haber hecho no se pudieron hacer».
Imagen de ello ha sido la pretemporada escenificada, donde Mezquita reconoce que el club ha tenido que ir «a marchas forzadas» adaptando rivales a las posibilidades del equipo. Unas dificultades ante las que, pese a todo, «hemos conseguido concretar dos partidos semanales, que era lo que el míster necesitaba».
PLANTILLA. En relación directa al grupo que competirá este curso defendiendo la elástica ribereña, el director deportivo blanquiazul manifiesta que «a día de hoy está prácticamente cerrado», aunque deja la puerta abierta con una ficha sénior y otras dos sub-23 a situaciones imprevistas que puedan suceder a «última hora».
De no haber cambio de planes, el plantel será el que ya se vio el domingo pasado en El Montecillo frente al Navalcarnero. Un equipo que ha generado cierto nivel de incertidumbre entre algunos de los aficionados al Grupo VIII (sobre todo a través de las redes sociales), pero que no preocupa a Mezquita. «Para un hombre como yo, con la experiencia que tiene en el fútbol, es muy hipotético afirmar que vamos a hacer tal o cual cosa. Yo me baso en hechos y realidades, no en redes sociales. Y la realidad es que somos la Arandina, un club importante, ambicioso, y que va a salir a competir».