La falta de fondos obliga a Ucas a no usar desfibriladores

S.F.L.
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Los dispositivos se han quedado sin batería e instalarla supone un gasto de 800 euros que la Unidad Canina de Rescate de Cubo no puede asumir

La falta de fondos obliga a Ucas a no usar desfibriladores - Foto: UCAS DE ARRATE.

Duro varapalo para la Unidad Canina de Rescate y Salvamento Ucas de Arrate. El escaso presupuesto del que dispone obliga a retirar de sus vehículos los dos desfibriladores externos automáticos donados por la Asociación Canina Burgalesa Soriana en 2019. A pesar de que durante este tiempo nunca los han utilizado, Valeriano de la Fuente, miembro fundador de la agrupación, confiesa sentir lástima de «no tener más remedio que dejar de ofrecer un servicio que puede salvar vidas por falta de fondos». 

Ambos dispositivos se han quedado sin batería e instalar otras nuevas para volver a ponerlos en funcionamiento supone un gasto de 800 euros que no pueden afrontar. Hasta el momento, la única vía económica que llegaba a la agrupación instalada en Cubo de Bureba entraba a través de la realización de exhibiciones con los perros, que han dejado de realizar porque los cinco animales que participaban en ellas tienen edades muy avanzadas y necesitan descansar. Oker, Jack, Lola, India y Zoe (Bordes Colli y Sabueso de San Humberto) continuarán participando en los operativos de búsqueda de personas desaparecidas pero no volverán a demostrar ante el público sus dotes de rastreo y reconocimiento. La Asociación sin ánimo de lucro no recibe ninguna ayuda económica por parte del Estado, lo que hace «imposible reactivar la prestación», aclara el portavoz.

La complicada situación financiera que atraviesa Ucas «no hace peligrar los dispositivos de rescate de los ciudadanos extraviados» según de la Fuente, pero este manifiesta que «antes nos trasladábamos hasta Málaga si recibíamos alguna alerta y ahora mismo no podríamos porque carecemos del dinero suficientes que conlleva un viaje que puede alargarse días». No obstante, la buena labor que llevan a cabo desde hace décadas, «continuará».

La firma de un convenio de colaboración con la Asociación Cántabra de Búsqueda y Rescate trae consigo la incorporación al grupo de trabajo a la empresa Drones Cantabria, que actuará en casos de emergencia, desaparición de personas o acciones derivadas de las mismas. De esta manera, los rastreadores tendrán dos perspectivas de la zona de búsqueda: terrestre y aérea. En el acuerdo plasmaron el compromiso de ejecutar entrenamientos conjuntos para la mejor actuación en caso de activación, manteniéndose en todo momento la premisa de que esta será voluntaria y altruista por cualquiera de las partes voluntarias. 

Asimismo, la Unidad participará en búsquedas de desaparecidos de los que perdieron la pista hace años y dejaron de seguir sus pasos. Además de contar con dichos artilugios que sobrevuelan cada zona, los voluntarios del proyecto Huellas amigas que iniciaron este año en la localidad burebana para trabajar con jóvenes conflictivos en sus instalaciones, colaborarán en las actuaciones.

Muestras de olor. La recolecta de olores en diferentes pueblos de la comarca burebana y de otras partes de la provincia y región no cesa, y ya son casi 1.000 las muestras de las que cuenta su banco de olor corporal. Los aromas personales recogidos de manera voluntaria los custodian en botes que quedan clausurados hasta el momento en el que reciban un aviso, en el supuesto que desaparezca una de las personas donantes.

 

ARCHIVADO EN: Bureba, India