El Aula Magna ha acogido esta mañana la entrega de los premios del Consejo Social de la Universidad de Burgos, que fueron fallados el pasado mes de febreros. Estos reconocimientos cumplen diez años de existencia con el objetivo de reconocer el talento y la excelencia de los miembros de la comunidad universitaria. En esta ocasión, y como novedad, se han incorporado por parte de la asociación de antiguos alumnos (Alumni) dos galardones para distinguir la trayectoria profesional de egresados del campus local. Los premiados han sido el catedrático Alfredo Jiménez, experto en negocios internacionales, e Inés Zurera, residente en Suiza y que se ocupa del cumplimiento y gobernanza de la UEFA.

El presidente del Consejo Social, Luis Abril, destacó la importancia en este momento de unas distinciones con las que se valora el "trabajo bien hecho", al tiempo que subrayó el papel de la UBU como "centro de saber y fuente de investigación" con un "bien noble" al que quiere contribuir este órgano de representación de la sociedad en la institución académica.

Por su parte, el vicerrector de investigación, José Miguel García, puso de relieve el papel del Consejo y la intención de la Universidad de seguir aumentando su vínculo con la sociedad.

En la categoría de Profesorado, se premió el trabajo "Burgos, 1921", que se ha realizado con la colaboración de la Fundación VIII Centenario de la Catedral, para acercar a los ciudadanos la celebración de los 700 años del templo. De igual forma, obtuvo un accésit el estudio sobre capacitación de profesionales y familiares para transmitir conocimiento y habilidades sostenibles a personas con síndrome de Donw.

El personal de administración y servicios recibió un accésit por la digitalización de los trámites académicos, mientras que el primer galardón fue para los responsables de la mejora de la accesibilidad de la página web de la institución. Finalmente, se concedieron diez distinciones a estudiantes con brillante expediente académico.