Una de las principales novedades para la convocatoria del próximo curso es el adelanto por parte del Ministerio de Educación y Formación Profesional de las fechas de presentación de las solicitudes para las ayudas al estudio tanto universitarias como no universitarias (Bachillerato y Formación Profesional). El plazo se abría en agosto y se extendía hasta octubre, mientras que este año comenzó el pasado 30 de marzo y se prolongará hasta el 12 de mayo en ambos casos. La vicerrectora de Estudiantes, Verónica Calderón, muestra su «preocupación» por que la información sobre esta modificación no llegue a todos los estudiantes, lo que ha llevado a la institución a lanzar una campaña entre el alumnado y enviar una notificación también a la Dirección Provincial de Educación.
Calderón reconoce la intención del Gobierno central de que los preuniversitarios conozcan si contarán o no con beca para iniciar sus estudios superiores aunque aún no lo tengan decidido, si bien asegura que «la primera comunicación al respecto no la van a conocer hasta el agosto». En este sentido, precisa que el pago de la misma «se adelantará como mucho a noviembre en lugar de diciembre como hasta ahora».
Más allá de los plazos de reintegro, la responsable académica subraya que este adelanto «complicará» la carga burocrática de las universidades porque «vamos a tener que resolver ayudas de estudiantes que no se matriculen en nuestro distrito». «Esperamos un aluvión de expedientes, de los que probablemente habrá que trasladar muchísimos a otras universidades y al revés», precisa.
Al margen de las becas estatales, tanto la Junta de Castilla y León como la propia UBU convocan ayudas al estudio. En el caso de la primera está abierto el plazo de la segunda convocatoria de este curso, dirigida a universitarios que han sido beneficiarios de la ayuda estatal con el fin de completarla. El montante que destina a este fin asciende a 1,5 millones de euros y la presentación de solicitudes puede realizarse hasta el 9 de mayo. Por su parte, la institución académica local también aporta para becas una partida de 130.000 euros que se cerró a finales de enero y cuyos destinatarios son aquellos estudiantes que no han podido beneficiarse de los apoyos económicos del Ministerio de Educación.