Los empresarios habían depositado sus esperanzas en la campaña de Navidad, la más fuerte para el sector, después del parón de las ventas sufrido en noviembre tras el fin de los bonos al consumo y el Black Friday o Viernes Negro. Sin embargo, sus expectativas no se han cumplido y las asociaciones de comerciantes que representan al colectivo hablan de «fiasco» y «decepción» a la hora de valorar la actividad en este periodo festivo. Miran ahora hacia las rebajas, que ya han iniciado algunas tiendas, pero prefieren no hacer pronósticos a la vista de los acontecimientos.
La agrupación Zona G de Gamonal realizó incluso un programa especial navideño para atraer a los clientes con actuaciones callejeras, decoraciones especiales y regalos en las tiendas, con una previsión inicial de incremento de la facturación del 20%. Su presidenta, Victoria Vélez, asegura que la sexta ola, con los contagios desbordados, ha afectado de lleno al gremio, «incrementándose aún más el comercio online» por los aislamientos y las cuarentenas. De hecho, señala que durante las dos semanas pasadas se daban picos de movimiento, con jornadas en las que «no había ni ambiente de compras y otras en las que el consumo fue mayor».
En cualquier caso, Vélez considera que las ventas «no terminan de arrancar» en las tiendas de proximidad, «sin que hayamos recuperado las pérdidas acumuladas», una opinión que comparte Julián Vesga, vicepresidente de la Federación de Empresarios de Comercio (FEC), quien asegura que «se ha trabajado como si fueran días normales y los establecimientos no se han llenado». Esta situación, según coinciden ambos, ha llevado a que algunos empresarios hayan adelantado las rebajas de invierno al pasado lunes en lugar de esperar al día 'oficial' de después de la festividad de Reyes (mañana viernes).
Otros, sin embargo, aguantarán hasta esa fecha tradicional siguiendo los pasos del gigante de Inditex y sabedores de que esta semana, por mucho que aumente la actividad, no se va a 'salvar' la campaña de Navidad, tal y como subraya Raúl Martínez, presidente de la asociación de comerciantes del casco histórico y la zona sur (Centro Burgos). «Esperamos que sean buenas, porque son las que más fuerzan tienen en Burgos», señala en referencia al periodo de descuentos, para el que «hay mercancía y esto supone una buena oportunidad de compra para los clientes».
Adelanto de compras. En esta valoración comercial navideña, que en el caso de Centro Burgos y Zona G estiman como «peor» que la de 2020, los empresarios muestran cierto desconcierto a la hora de señalar una razón en concreto para justificar este resultado. «Cada año nos afecta una cosa. El pasado fueron las restricciones y este la sexta ola», precisa Vesga, añadiendo también otras circunstancias que han podido tener que ver como el adelanto de las compras a noviembre por la campaña de bonos al consumo o el Black Friday.
Martínez, por su parte, alude al «miedo» que se ha generado entre los ciudadanos, que ha llevado a la suspensión de numerosas cenas y celebraciones que afectan de forma especial al textil y al calzado. «Si no hay eventos, no se compra en este sector», remarca, aunque reconoce que «nadie entiende lo que ha pasado este diciembre». A pesar de este «fiasco», confía en que el sector mejore los resultados en comparación con el año pasado. En este sentido, valora de forma positiva la evolución de las ventas desde el verano y prevé que el ejercicio cierre con un crecimiento del 20%.
Aún no han hecho números para poder aportar cifras concretas y no será hasta bien entrado el mes de enero cuando la Federación de Empresarios de Comercio realice su balance anual. «Por el momento, estamos con el día a día», sostiene Vesga, quien, al igual que Vélez, mira hacia las rebajas por excelencia aunque sin atreverse a mostrar optimismo ni pesimismo: «Estamos a la expectativa».