La plataforma Talento Ribera, creada en septiembre, ya cuenta con unas 150 empresas inscritas, alrededor de 300 candidatos y 120 ofertas de trabajo. De estas, cerca de un 50% no están siendo atendidas, como precisa el director de San Gabriel, José Enrique García, impulsor de la iniciativa.

La mayor necesidad de puestos está en soldadura, robótica o sanidad. También en logística u obra civil, pero estos dos ámbitos aún no registran ni un solo candidato en la plataforma. 

«Es un techo brutal al crecimiento», lamenta García, que habla de sectores de «muy difícil cobertura» aunque sí que existan estudios para formarse. Pero, según continúa, algunos no resultan atractivos para los jóvenes, por lo que, a su juicio, se ha de fomentar la formación en 4 patas que sí despiertan interés como la robótica, la salud, el medio ambiente y la digitalización.

Así, defiende, «Aranda podría crecer, atraer y retener talento». Todo ello dentro de una apuesta decidida por «posicionar a la ciudad como un lugar para venir a trabajar». García se muestra convencido de que «una solución es aprovechar la oportunidad de Sonorama para recalcar que Aranda también es una ciudad que ofrece trabajo de calidad más allá del vino y el lechazo». 

En esta línea, critica que la Administración se haya quedado en el corto plazo y no se plantee un  modelo de ciudad para los próximos 25 años. «Para retener hay que prestar servicios, una buena programación cultural, instalaciones deportivas... Hace falta un proyecto de ciudad y esa responsabilidad no se la podemos endosar a los empresarios, es asunto del Ayuntamiento. Se trata de un problema urgente», zanja.