Transformación constante

C.P.
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El Hereda San Pablo Burgos ha realizado 15 operaciones entre fichajes y salidas una vez empezado el curso y se espera que haya al menos una incorporación más de cara a las últimas cinco jornadas ligueras

Julian Gamble, en el centro de la imagen, está prácticamente descartado. - Foto: Luis López Araico

El Hereda San Pablo Burgos está afrontando la temporada más compleja desde que está en la élite. Ni siquiera en la campaña de su debut en la Liga Endesa estaba en una situación tan delicada a estas alturas. Y eso que lo ha intentado todo para enderezar el rumbo. Ha cambiado dos veces de entrenador y ha modificado notablemente la plantilla hasta realizar un total de 15 operaciones con el curso empezado, pero no ha conseguido dar con la tecla que le aleje del peligro. Sin duda, un año muy complicado en los despachos que se cerrará con al menos otra incorporación para suplir la más que probable salida de Julian Gamble.

La llegada de un nuevo pívot se antoja crucial para afrontar la 'final' del próximo domingo en la cancha del MoraBanc Andorra. Tendrá que ser un movimiento rápido y que se adapte con facilidad a la competición y a la filosofía de Paco Olmos. Ese fichaje se convertiría en el decimosexto movimiento desde que se empezó a cambiar la plantilla inicial.

El primero en 'abandonar' el proyecto azulón fue Zan Tabak, que no logró los resultados deseados en el inicio del curso y dejó una vacante en el banquillo que dos semanas más tarde ocupó Salvador Maldonado. Poco después del adiós del técnico croata, llegaron los 'cortes' de Suleiman Braimoh y Steve Zack, dando así un cambio radical al juego interior. La incorporación de Julian Gamble en noviembre cerró una primera ola de movimientos en busca de la reacción.

Faltaba todavía un recambio en la posición de ala-pívot y estuvo cerca de firmar Jarell Eddie, aunque finalmente fue Hayden Dalton el que llegó a Burgos con un contrato temporal de mes y medio. Después, salió con destino al Hapoel Holon de Israel, donde coincidió con el ya mencionado Steve Zack y Tyrus McGee, que abandonó el Hereda San Pablo en el inicio de 2022.

Para entonces, Maldonado ya había dejado de ser entrenador azulón. Su paso fue realmente efímero porque el club decidió apostar por Paco Olmos, el entrenador de moda de la ACB con el Río Breogán. Como regalo de bienvenida, aterrizó en Burgos Landry Nnoko procedente del Baskonia y todo apuntaba a que sería Gamble el que saldría con destino a Málaga, pero la imposibilidad de jugar la Basketball Champions League con el Unicaja frenó la operación y acabó siendo Dejan Kravic quien dejó el San Pablo después de una temporada 2021/22 inolvidable.

Además, se apostó finalmente por Jarell Eddie como '4' tirador y llegó también Tarik Phillip justo antes de la Copa Intercontinental para ayudar en la creación del juego y dar más fluidez al ataque burgalés. En ese momento, parecía que iba a llegar la calma al Hereda San Pablo y así ha sido durante casi tres meses. Sin embargo, la agónica situación clasificatoria en la que se encuentra inmerso el equipo y la salida más que probable de Gamble harán que se mueva de nuevo el 'avispero' en busca de soluciones.

En toda esta vorágine de cambios, el Hereda San Pablo ha mantenido el núcleo que se conserva de la temporada anterior y que es el motor del vestuario: Vítor Benite, Xavi Rabaseda y Alex Renfroe. También está asumiendo galones el recién llegado Dani Díez, muy involucrado con el proyecto.