«Yo siempre estoy con los débiles. Por eso soy psiquiatra»

ANGÉLICA GONZÁLEZ
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Juan Antonio García Mellado es el nuevo jefe del Servicio de Psiquiatría del Hospital Universitario de Burgos. En una entrevista con DB habla de la salud mental, se la asistencia médica y de las medidas que quiere poner en marcha

«Yo siempre estoy con los débiles. Por eso soy psiquiatra» - Foto: Alberto Rodrigo

Cuenta, con orgullo poco disimulado,  que fue el primer psiquiatra de Castilla y León que formó parte de un equipo de salud mental itinerante, «que era coger un coche e ir cada día a una zona básica de salud rural y atender a las personas con enfermedad mental allí donde vivían». Lo hizo en Zamora, provincia que es un auténtico referente en la psiquiatría comunitaria y de cercanía a nivel nacional e internacional, y a la que está vinculado, pues allí creció y allí ha ejercido hasta el pasado mes de diciembre cuando llegó a  a tomar posesión de la plaza de jefe del servicio de Psiquiatría del Hospital Universitario de Burgos (HUBU), en sustitución de Jesús de la Gándara. Juan Antonio Mellado (Salamanca, 1968) presentó un proyecto para esta provincia basado en la proximidad, la precisión y la personalización de la atención a los pacientes que convenció al tribunal y que ha empezado a poner en marcha sin perder un segundo. Volver a Burgos es, afirma, cerrar un círculo, ya que fue aquí donde se formó como psiquiatra hasta el año 2000  tras estudiar Medicina en Salamanca. «He visto la ciudad muy cambiada a mejor, creo que hay un potencial enorme aquí, incluso más que en Valladolid», explica este profesional, que no ha dejado nunca de investigar y publicar -«si algo soy es investigador»- y que tiene en mente un cambio radical de todo el servicio.

¿Viene con la intención de resucitar aquí la psiquiatría comunitaria?
Está escrito en mi proyecto de jefatura de servicio, que se define con tres palabras: proximidad, precisión y personalización. Este modelo incluye que los profesionales, psiquiatras, psicólogos, enfermeras de salud mental..., nos acerquemos allí donde vive la gente y donde tiene los problemas porque conocer el entorno da muchos datos que no te los da estar sentado en una silla y atendiendo 20 minutos a cada persona. Cuando llegué en diciembre me alarmé cuando la psiquiatra de Miranda -cuyo servicio, como el de Aranda, no depende de aquí- me dijo que de tres profesionales se habían ido dos y estaba sola. Y esas son plazas no de difícil sino de imposible cobertura, no hay un psiquiatra en España que tenga interés en ir a Miranda sin guardias -económicamente no compensa-, sin formación, sin docencia y sin investigación, teniendo a media hora el País Vasco donde solo por ir a trabajar cobras mil euros más que aquí. Así que yo no soy el responsable de Miranda pero tengo que dar un apoyo para que 40.000 personas de esta provincia estén bien atendidas, y para eso desde hace dos semanas vamos cuatro psiquiatras, dos residentes de 4º año de Psiquiatría y Psicología, a pasar consulta allí.

¿Cómo ha sido recibida esta medida en Burgos?
Bien, desde la gerencia y la dirección médica lo han facilitado

¿Y los profesionales?
Me apunté yo el primero por responsabilidad. Nos vamos los lunes a las dos y media y volvemos a las nueve de la noche.

¿Va a extender esta forma de trabajo a otros puntos de la provincia?
Pues dos de los cuatro psiquiatras que nos hemos apuntado a ir a Miranda dijimos que estábamos dispuestos a ir a Villarcayo a atender a la zona de Merindades y ya hemos empezado a trabajar para aplicar este modelo comunitario, de estar in situ en una población alejada de dispositivos sanitarios con mucha coordinación con los recursos del entorno. El caso de Aranda es algo distinto: ahora cuenta con cuatro psiquiatras -dos a media jornada y dos a jornada completa- que van y vienen todos los días desde Valladolid, pero lo que ha pasado en Miranda va a pasar en Aranda pasado mañana. Por lo que he pedido integrar en el servicio de Burgos la salud mental de Aranda y Miranda.

¿Qué pasos ha dado ya para implementar este modelo que, entre otras cosas, supondrá que los equipos de salud mental vuelvan a los centros de salud?
Ya lo he solicitado porque el servicio de Psiquiatría no tiene que estar escondido sino cerca de nuestros proveedores de salud que es la atención primaria. Para ello se tiene que modificar el modelo de distrito único que existe actualmente y que supone que el médico de cabecera que pide un volante para el psiquiatra o el psicólogo no sabe qué profesionales van a ver a su paciente porque llegan aquí esas peticiones y se distribuyen aleatoriamente, por lo que no hay un psiquiatra de referencia, lo que dificulta la coordinación y la comunicación.

Entiendo que esta medida habrá sido muy bien recibida por parte de los servicios sociales, que llevan mucho tiempo solicitando algo así.
Pues sí, ya me he reunido con ellos. Una de las primeras cosas que decidí hacer al llegar fue conocer todos los dispositivos sociosanitarios y sus responsables: la Comisión Sociosanitaria, Prosame, Aspanias, la miniresidencia de la Fundación Intras, el CAD de Cruz Roja y Proyecto Hombre. Me falta Autismo Burgos, Fundación Lesmes... Pero he querido conocerles, explicarles mi proyecto de Psiquiatría y sí es verdad que todos se han sentido agradecidos por este modelo que planteo.

(La entrevista completa, en la edición de papel de hoy de Diario de Burgos)