Los responsables de las escuelas infantiles privadas se sienten «ahogados económicamente» al no haber recibido aún el primer anticipo de la Consejería de Educación para financiar la gratuidad del último curso del primer ciclo de esta etapa. De hecho, la agrupación burgalesa que aglutina a este colectivo asegura que el 95% de los centros ha tenido que buscar financiación a través de créditos bancarios, no exentos de «trabas», para asumir dicho coste porque «los gastos que tenemos son los mismos».  

Nuria Alonso, una de las portavoces locales de la Asociación de Centros Infantiles Privados de Castilla y León, se muestra crítica con una situación que han expuesto a la Administración regional, obteniendo como respuesta que un tercio de dicha subvención se haría efectiva entre septiembre y diciembre y el resto el próximo año. «Aún no hemos recibido nada y así no podemos mantenernos», subraya, expresando en este punto la opinión del sector de que «lo lógico es que el primer pago se hubiera realizado al iniciarse el curso y el segundo durante el mes de enero». 

El colectivo no comparte cómo se ha puesto en marcha la gratuidad de las aulas de 2 a 3 años y así lo ha manifestado en reiteradas ocasiones en las que ha mostrado sus dudas al respecto, al igual que su incertidumbre. Alonso explica que las escuelas se encuentran todavía realizando trámites administrativos porque la Junta «no sabe realmente los niños con los que cuenta cada centro», además de que aún no han recibido la visita de la Inspección. De igual forma, censura que las ratios mínimas «sean distintas» en los colegios públicos que en estas escuelas y asegura no entender que en los primeros «haya aulas con 5 niños y a nosotros se nos exija un mínimo de 12».

El horario lectivo que financia la Consejería es de 9 a 14 horas, por lo que el servicio que se presta más allá de esa franja lo costean las familias (...).

(Más información, en la edición impresa de Diario de Burgos de hoy viernes o aquí)