En los tiempos que corren, los presupuestos municipales del Ayuntamiento del Valle de Tobalina de 2022 van a dar un pequeño respiro a 355 hogares del municipio. Desde hace más de dos décadas ya venían recibiendo una ayuda anual de 120 euros por su gasto en electricidad. Este ejercicio se subirá a 150 euros y se dará también oportunidad de solicitarlas a las empresas, que hasta ahora estaban excluidas. La alcaldesa, Raquel González, argumentó el aumento de esta partida hasta 58.500 euros en la pérdida de población y empleo que ha dejado el cierre de Garoña y la crisis energética «que está pasando factura al poder adquisitivo de todos los vecinos».
Los presupuestos aprobados esta semana alcanzan los 3,8 millones, que con los 1,2 millones de la residencia de mayores, se elevan a poco más de 5 millones. De ellos, 1,3 millones estarán destinados a inversiones y en este capítulo, el nuevo pabellón multifuncional, en construcción, será uno de los más beneficiados, al estar reservados 205.000 euros a la urbanización de su exterior, así como otros 382.000 a concluir y equipar su interior.
Asimismo, el presupuesto reserva 112.000 euros a la compra de pequeñas embarcaciones para el embarcadero y 120.000, a mobiliario para la residencia de mayores. La pavimentación de calles, sustitución de redes de saneamiento y otras infraestructuras básicas cuentan con 320.000 euros, que en parte se subvencionarán con la ayuda de Planes Provinciales, pero de las que el equipo de gobierno no quiso detallar a qué pueblos llegarán «porque se está redactando el proyecto y no sabemos aún hasta dónde podremos llegar».
A la vez, el Consistorio tobalinés apostará este año preparar proyectos que concurrirán a varias convocatorias de ayudas europeas, en especial, la vinculada a la Transición Justa. La instalación de placas solares en edificios públicos, la mejora de espacios urbanos del centro de Quintana Martín-Galíndez y Pedrosa de Tobalina o la remodelación completa de la residencia son algunas de las inversiones que cuelgan de los fondos europeos.
Ante ello, el portavoz de Vivir en Tobalina, Luis Conde, se mostró muy crítico con unos presupuestos que aseguró están «intencionadamente inflados en un millón de euros tanto en gastos, como en los ingresos que se esperan de fondos europeos». Según sus cálculos, los 16,9 millones de ayudas para la Transición Justa que repartirá el Ministerio para la Transición Ecológica este año tienen como posibles destinatarios a cerca de 200 municipios de toda España, lo que implica que, «si todos piden 3 millones, solo va a haber ayuda para uno de cada seis municipios». La alcaldesa dijo confiar en lograr alguna de las subvenciones de fondos europeos, aunque admitió que «nuestros proyectos se pueden ver desvanecidos por lo de ayuntamientos más potentes, como Miranda de Ebro y Medina de Pomar». «Si no las conseguimos no será nuestro fracaso, sino el fracaso del medio rural», sentenció.
Apoyo socialista a pedanías. Mientras, el socialista Jesús Ángel López de Mendoza, que apoyó los presupuestos del PP, justificó su voto en que «ha existido diálogo y se han incluido propuestas nuestras, como la subida del Plan de Obras para pedanías de 60.000 a 70.000 euros; el Plan de Caminos, de 50.000 a 80.000 euros; y el plan de iglesias, de 10.000 a 20.000 euros».