Diego Rojas, a por el ascenso

ÁLVAR ORTEGA
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El burgalés, exentrenador de la Arandina y Burgos Promesas, ha encontrado en el Almazán su casa y lo ha colado en el play off a Segunda RFEF después de un año histórico

Diego Rojas posa con un balón en La Arboleda, campo del Almazán. - Foto: Eugenio Gutiérrez Martínez

El burgalés Diego Rojas estuvo a punto de cerrar su ciclo en la localidad soriana de Almazán el verano pasado. Con un equipo que no tiene una estructura profesional logró los mismos puntos que el Real Ávila, aunque por el golaverage se quedó fuera del play off de ascenso a la Segunda RFEF. «Estuvimos a punto de dejarlo pero dije 'un año más. Nos hemos quedado a las puertas, podemos ser equipo de play off'» y tenía razón. El sábado su equipo disputará la promoción más de tres décadas después, en la semifinal ante el Atlético Tordesillas.

Solo el Guijuelo (75) ha sumado más puntos que el conjunto adnamantino (64) en 32 jornadas, lo que supone su mejor posición en 55 años de historia. Y como subcampeón, aspira a todo: «Hemos hecho ya algo que no se había conseguido, ahora el único objetivo es ascender. Llegar a la final únicamente no vale para nada. Hay que ser ambiciosos como lo hemos sido todo el año», afirma el exentrenador de la Arandina y del Burgos Promesas.

De ambas etapas guarda experiencias que le han convertido en quien es, aunque él siempre opta por poner el foco en sus pupilos: «La parte del entrenador es secundaria. El mérito lo tienen los jugadores. Yo sabía que había un potencial muy grande», confiesa Rojas, que volvió al club soriano en el año 2018 después una primera etapa en la que salvó al equipo y lo dejó quinto. Entre medias probó suerte en la Arandina, pero «Almazán es como mi casa», así que decidió intentarlo por segunda ocasión.

Una casa mucho más lejana, lo cual no es un impedimento: «Hago 200 kilómetros de ida y 200 de vuelta casi cada día. Unos 80.000 al año porque yo voy y vengo. Trabajo en Burgos por la mañana, a las cinco salgo y vuelvo a las doce de la noche. Y encantado. En Almazán soy feliz», añade el preparador burgalés, que ve el histórico logro del play off como un regalo para su sacrificio diario. Pero no se conforma.

«Queríamos meternos en play off y también lo hemos hecho en Copa. Hemos logrado los mejores números de la historia del club... pero eso al final solo era el primer objetivo», concluye Rojas, que tiene entre ceja y ceja el ascenso.