Intervenidos en Burgos 800 kilogramos de piñas piñoneras

DB
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El Seprona ha localizado la mercancía en un vehículo cuando era transportada para su comercialización. El infractor realizó el aprovechamiento fuera de la época hábil y carecía de las autorizaciones necesarias para su transporte

800 kilogramos de piñas piñoneras intervenidas por la Guardia Civil al ser obtenidas ilegalmente.

La Guardia Civil ha localizado e intervenido en Burgos 800 kilogramos de piñas piñoneras, recogidas y transportadas ilegalmente, por lo que se han levantado dos actas denuncia al infractor, que carecía de autorización para su transporte, apropiándose además de estos frutos silvestres, actividad realizada fuera de época hábil.

Una patrulla del Seprona de la Comandancia paraba días atrás en una carretera del Alfoz de Burgos un vehículo monovolumen e identificaba a su conductor. En la zona de carga transportaba 18 sacos cuyo interior fue inspeccionado para verificar que contenían piñas piñoneras que presentaban un aspecto muy verde, por lo que acababan de ser recolectadas, lo que indicaba que dicha acción había sido realizada fuera de la época hábil, para la que quedan aún varias semanas.

Ante la aparente recolección de manera ilícita de una importante cantidad de piñas, supuestamente para su posterior comercialización en el mercado negro, se solicitaron los permisos y autorizaciones necesarias para su aprovechamiento, de los cuáles carecía.

Entre las irregularidades encontradas figura el carecer de autorización el medio de transporte -conforme a la Orden AYG/1066/2011 por la que se regula el procedimiento de acreditación de la trazabilidad en la producción, transformación y distribución de piñas y piñones en Castilla y León-, y realizar un aprovechamiento no efectuándose en la época establecida en la normativa, acción para la que quedaban aún varias semanas.

La mercancía ha sido intervenida y depositada, en tanto que las actas-denuncia serán remitidas a la Junta de Castilla y León.

Paralelamente se ha iniciado una investigación para determinar el paraje del que fueron sustraídas y su titularidad -supuestamente ajena ésta a los hechos-, ya que no se descarta que el infractor pudiera haber incurrido en un delito de hurto.