La Diputación aboga por no limitar los nuevos parques eólicos

P.C.P.
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Rechaza la proposición del PSOE en la que reclamaba a la Junta la suspensión cautelar de todos los expedientes en curso y la aprobación de un nuevo marco regulatorio compatible con el turismo y la protección medioambiental

Nicasio Gómez, en primer plano, diputado de Vox. - Foto: Valdivielso

La Diputación de Burgos ha rechazado la proposición del Partido Socialista para poner coto a la proliferación de nuevos parques eólicos en la provincia, fundamentalmente en la comarca de las Merindades, donde ya se supera en un 50% las cifras que establecía el plan redactado por la Junta de Castilla y León y que se ha quedado obsoleto, según explicó el diputado Isaac Angulo, para pedir la suspensión cautelar de todos los expedientes en curso mientras que se redacta un nuevo marco regulatorio en un plazo máximo de tres meses.

En el último debate del pleno ordinario de abril, Angulo ha recalcado que, "si los datos de las empresas son ciertos, en la provincia de Burgos tenemos 2.000 megavatios, lo que supone que tendríamos capacidad para cinco millones y pico de hogares. Si esto es cierto, nos sobra", ha insistido para, después añadir que Iberdrola habla de 30.000 megavatios en Castilla y León, lo que supone cubrir 28 millones de hogares.

El Partido Popular, Ciudadanos y Vox han votado en contra de unos planteamientos que el portavoz del PP ha tildado de "provincianos" y "egoístas" por entender que las "energías renovables han venido para quedarse" y que son "una oportunidad" para "esta tierra" que es la que tiene hectáreas disponibles para instalar megavatios, que a su vez redundan en beneficio de los municipios donde de colocan estos parques, en opinión de Borja Suárez.

El también alcalde de Medina de Pomar le ha contestado que esos efectos positivos no se perciben, al menos en términos de aumento de población, como no se vieron en el entorno de Garoña. "Lo único que hay que tener en cuenta es si quieremos proteger nuestro patrimonio o no", ha afirmado Angulo. "Yo me preocupo por las Merindades y el turismo", ha añadido.

La proposición ha sido rechazada con 14 votos en contra, la abstención de Mar Alcalde y los 10 votos a favor del PSOE.

Vox, arrinconado. En la primera de las dos proposiciones que se han debatido en el Pleno, todos los partidos políticos han arremetido contra Vox por pedir la soberanía energética y alimentaria de España. Su diputado, Nicasio Gómez, ha afirmado que el Gobierno "sociocomunista" de Sánchez es una "fábrica de misera" y ha llegado a afirmar que no es fruto de la voluntad de los votantes, lo que en palabras de Eduardo Munguía, portavoz de Ciudadanos, "agrava la preocupación por la llegada de grupos radicales", además de pintar un país más propio de los años 40 o 50. "Es su crónica, basada en un falseamiento de la realidad", ha añadido. Tampoco ha ahorrado calificativos sobre el texto el PP: "Ya el propio lenguaje hace que nos espante, sin entrar en las propias incoherencias", ha apuntado Borja Suárez, mientras que David Jurado, portavoz socialista, ha agradecido al resto de los grupos que no entrasen a debatir "soflamas tóxicas y peligrosas".

En el Pleno también ha habido debate sobre cuestiones de Personal, como el decreto de teletrabajo. El vicepresidente primero ha sido increpado e insultado por dos representantes del SOI cuando le decía a Jurado que la plantilla del área que dirige "está un poco cansada de las críticas" hacia su trabajo: "¡Pues déjales en paz! Si eres un ignorante no les pongas a los pies de los caballos", le han espetado los sindicalistas antes de que el presidente les llamase la atención.