Los tres años y medio de gobierno en Los Barrios de Bureba no han resultado sencillos para Elías Plaza, que tras las complicaciones que trajo consigo la pandemia y los diferentes asuntos municipales, también se ha enfrentado a una moción de censura presentada por su compañero de partido, Daniel Fontes, que finalmente no salió a flote, y ahora a las presiones de algunos vecinos molestos que han transmitido a través de un cartel su descontento como consecuencia de las intenciones del alcalde en reparar el puente del molino.

Al autor o autores del aviso en el que hasta el día de ayer podía leerse ¡Atención alcalde! ¿No te vale con el lavadero, no? No toques el puente del molino, no les tembló el pulso a la hora de plasmar con bolígrafo y en letra mayúscula un mensaje directo para el alcalde, que no se muestra afectado por lo ocurrido y asegura que «es normal que haya gente que no esté de acuerdo con las gestiones que tramito. Ante ello, invito a esas personas a que se presenten en las próximas elecciones y cojan mi relevo».  

El equipo de gobierno ordenó a principios de año la limpieza y el acondicionamiento de la zona aledaña a la pasarela de piedra ya que según Plaza «llevaba más de 30 años sin realizarse». Como consecuencia de las actuaciones se dejaron ver de nuevo los dos arcos, por lo que apostaron por continuar con la conservación del lugar y dedicar una cantidad económica para la reparación del puente, que actualmente presenta un estado «un tanto delicado después de que un camión arrollase parte de uno de los muros laterales, aunque haya vecinos en contra», aclara el político. 

Un cartel apareció pegado en el tablón de anuncios municipal. - Foto: DB

Además de eliminar la vegetación que invadía el área, el Consistorio contactó con un arqueólogo y un historiador para que comprobaran si la infraestructura tenía algún interés. «Nos dijeron que no ya que la construcción se remonta a unos dos siglos atrás. No obstante, mantenemos comunicación con la Confederación Hidrográfica del Ebro para conocer los pasos que debemos dar para su rehabilitación», añade. A lo largo del año actual, el Ayuntamiento ha destinado 2.000 euros para acometer las labores de mantenimiento y, pese a que pretenden llevar a cabo la iniciativa, a día de hoy «desconocemos la cantidad a la qué ascenderá el presupuesto», manifiesta.

El texto redactado por algún vecino enfadado también hace hincapié al antiguo lavadero, que según los datos que aporta el regidor a este periódico, «desde el año 2000 hubo iniciativas para recuperarlo pero como acumulaba tanta basura entendimos que no tenía sentido dejarlo como se encontraba, decidimos taparlo y por encima ubicamos el parque infantil», expone.  Esta decisión no la compartieron algunos residentes del pueblo y por ello exigen en el cartel que no se toque el puente.

Ante lo sucedido, Elías Plaza no tira la toalla y mantiene que continuará desarrollando proyectos que hagan de Los Barrios «un lugar más atractivo», como la campaña de excavación junto a la ermita de San Fagún, con el objetivo de buscar los enigmas que esconde su privilegiada ubicación y acondicionar posteriormente la zona para que los turistas puedan contemplar los hallazgos. «En el último año he sufrido muchísimas presiones e intentos para apartarme de la gestión. He hablado con los habitantes del municipio y pedanías y he tomado la decisión de seguir», sentencia.