La magistrada del Juzgado de lo Penal número 1 de la capital absolvió al expresidente de Caja de Burgos José María Arribas del delito de administración desleal de la entidad por la concesión de una serie de créditos en favor de sus empresas que alcanzaban alrededor de los 35 millones de euros. La sentencia no considera probado ni que se beneficiase de su cargo para obtener dichas operaciones ni tampoco que influyese en la decisión del resto de consejeros, que eran quienes daban el visto bueno. De igual manera, no observa irregularidad en el cobro de 81.408 euros en concepto de dietas por las reuniones mantenidas durante la fusión de Banca Cívica. El Ministerio Fiscal pidió por estos hechos tres años de prisión.

La jueza considera probado que en el tiempo que ostentó la presidencia del Consejo de Administración de Caja de Burgos, se otorgaron a su favor o al de empresas con las que guardaba relación (principalmente INDASA e Industrias Basati), una treintena de contratos de financiación. Estas operaciones, autorizadas entre febrero de 2005 y julio de 2010, sumaron alrededor de 35 millones de euros, si bien durante la vista oral Arribas insistió en que realmente fueron 22 millones de los cuales, según un informe de CaixaBank, había amortizado su práctica totalidad. La sentencia confirma esta cancelación.

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