José María Chomón

Bailando bajo el diluvio

José María Chomón


Repoblación desleal

05/05/2022

El pasado 2 de mayo, en medio de la tormenta oceánica sobre un todopoderoso espiador llamado Pegasus que dejó con las nalgas al aire al Gobierno, la baronesa Ayuso sentenció: «Madrid es la España necesaria». Y mientras Madrid se reivindica como punta de lanza y tierra de acogida, otros territorios, como nuestro Burgos y nuestra Castilla y León, se desangran por la interminable patología de la despoblación.
La primera e imprescindible premisa para resolver los problemas es huir de los populismos y acepar una realidad que ningún político quiere expresar en público: cientos de nuestros pueblos están abocados a la desaparición o a su conversión en lugares de segunda residencia. No quiere esto decir que se deba abandonar a sus habitantes, pero es necesario entender que la dotación de servicios e infraestructuras, de la que tanto hablan estos políticos, no es una garantía para revertir la situación. La pérdida de población afecta también a varias de nuestras principales ciudades.

Esa España necesaria que es Madrid y otra España, supongo que igual de necesaria, como es el País Vasco, son lugares a los que muchos de nuestros convecinos se marchan atraídos por mayores y mejores oportunidades. Son, según algunos, la 'competencia desleal' que nos empobrece porque atrae el talento de nuestros jóvenes. Las críticas a las ventajas fiscales del País Vasco vienen siendo recurrentes, pero para la baronesa Ayuso desde estas tierras se oyen muchos aplausos mientras un día sí y otro también la pérdida de población se acrecienta. 

Nuestra Comunidad sufre una grave reconfiguración del sistema de poblamiento, producto del envejecimiento y la baja natalidad, que no se equilibra con la llegada de emigrantes, y por la huida de muchos de nuestros jóvenes atraídos por mejores carreras profesionales, mejores salarios y más oportunidades laborales. Madrid sigue ejerciendo el centralismo, como lo ejerce Valladolid en el territorio autonómico. Mientras esto sucede, nuestros ¿líderes? municipales, provinciales y autonómicos bailan al son de Celtas Cortos eso de tranquilo majete en tu sillón.