El mensaje que lanzó el embajador británico Hugh Elliott durante su visita a Burgos, en el que recordaba una bonita historia de su juventud, cuando fue acogido por una familia burgalesa al extraviar Renfe su bicicleta, ha dado la vuelta al país. Medios de todos los ámbitos han rebotado la petición para que el diplomático pudiera agradecer en persona a Lourdes Arnaiz, la persona que le invitó a su casa, tan noble gesto.
Sin embargo, este sábado hemos conocido el triste desenlace. Según Elliott, que ha colgado un vídeo en Twitter, su amiga Lourdes falleció con 35 años a causa de la esclerosis múltiple que sufría. No obstante, sí ha podido contactar con su hermano Alfonso, al que conoció en Burgos hace 35 años, y ha asegurado que se reunirán en breve.
Además, ha pedido prestar atención, ayuda y una mano como voluntarios, a las asociaciones que luchan para investigar el por qué de esta enfermedad degenerativa y tratar de lograr una cura. Ha enlazado las cuentas de redes sociales de la
Asociación Española de Esclerosis Múltiple, de la que opera en Burgos, en Santiago de Compostela (su destino cuando llegó por primera vez a España) y la de Salamanca (donde ejerció como profesor y conoció a su mujer).