La Universidad de Burgos trabaja cada año en el incremento de la oferta de plazas para los alumnos que desean continuar sus estudios en el extranjero, ya sea dentro del programa Erasmus como del propio UBUGlobal, que se ejecuta a través de convenios con campus de fuera de Europa. El primero es sin duda el más demandado y el que cuenta con mayor número de vacantes, con hasta 892 para el próximo curso, lo que incrementa las posibilidades de los estudiantes para acceder a sus destinos. No obstante, estos tienen que cumplir con un contrato de estudios para no verse obligados a devolver la beca que reciben y en el que se ha incluido un nuevo criterio de cara al próximo curso 2023-2024.
El Servicio Español para la Internacionalización de la Educación (SEPIE) reconoce la denominación de la llamada 'beca 0' pero deja en manos de las universidades de origen los requisitos para que así sea considerada. Hasta el momento, la convocatoria de la institución académica local incluía el de matricularse y cursar (asistir a clase y realizar las pruebas de evaluación) un mínimo de 12 créditos (dos asignaturas) y un máximo de 30 en un semestre, exigencia que mantiene pero que reforzará con la de aprobar al menos seis, ya que «de lo contrario deberá reintegrar los fondos Erasmus que hubieran podido recibir», considerándose así una movilidad «sin financiación».
Esta medida responde a la pretensión de la UBU de que los universitarios aprovechen al máximo su estancia en campus europeos, además de que tomen conciencia y entiendan que, en caso contrario, «están quitando la financiación que reciben a otro estudiante que ha podido quedarse fuera del programa», señalan fuentes académicas. De igual forma, precisan que este tipo de casos se produce de manera «excepcional», dado que el número de jóvenes que deben reintegrar la ayuda «es mínimo».
De cualquier forma, la Universidad busca que no se den este tipo de situaciones, advirtiendo, además, de que algunas universidades de destino tienen sus propios criterios, algo que deben tener en cuenta especialmente los alumnos que estudian dobles grados, al igual que en otros casos el hecho de que «el reconocimiento académico puede ser nulo» dependiendo de la oferta de cada campus.
Renuncias. La media fue abordada en noviembre por la Comisión de Relaciones Internacionales, de la forman parte representantes de cada centro del campus y que ha quedado recogida en la convocatoria de 2023-2024, cuyo plazo de solicitudes se encuentra abierto hasta el miércoles. En la misma también se abordan las renuncias de plazas una vez aceptadas, que, salvo causa justificada, suponen no poder participar en los programas de movilidad del año siguiente.
Es la Universidad de Burgos la que gestiona todas las ayudas Erasmus. Por un lado las que corresponden a fondos europeos y del Estado y, por otro, las propias de cada Comunidad. Castilla y León convoca cada año ayudas complementarias para estos estudiantes, cuya cuantía depende del número de peticiones, a las que se suman las específicas del Banco Santander. En cuanto a las estatales, dependen del nivel de vida del país de destino, oscilando entre los 250 euros de Bulgaria, Polonia o Croacia y los 350 euros que se contemplan para Finlandia, Suecia, Dinamarca, Noruega y Finlandia.