El Hereda San Pablo ha desaprovechado una oportunidad de oro para recortar distancias con rivales directos al caer (84-79) en la cancha del Gipuzkoa Basket. El conjunto burgalés alternó minutos brillantes con otros horribles y lo acabó pagando con la derrota. Un día más, volvió a mostrar dos caras y contra rivales de la zona alta es un lujo que no se puede permitir. El máximo anotador local fue Jaworski con 30 puntos y el máximo anotador visitante Mahalbasic con 21.
El equipo azulón firmó un primer cuarto para olvidar, de lo peor de la temporada. Solo fue capaz de anotar cinco puntos, mientras que el Gipuzkoa hizo lo que quiso y se fue hasta los 23. La historia cambió por completo en el segundo parcial, en el que apretó atrás y se reencontró consigo mismo en ataque. Eso le permitió anotar 39 puntos y dar la vuelta a un partido que tenía muy cuesta arriba con Mahalbasic y Barrera como protagonistas (37-44).
Tras el descanso, el San Pablo comenzó anotando con mucha facilidad y llegó a tener una renta de 13 puntos, pero de nuevo cayó en la relajación y dio vida a los donostiarras, que recuperaron el liderazgo en el marcador a falta de 10 minutos para el final (65-57). En el tramo decisivo, el Gipuzkoa estuvo mejor y los azulones acusaron la eliminación de Barrera, que estaba siendo su mejor hombre en ese momento. Al final, una derrota ajustada (84-79) que les permite salvar el 'average' particular, pero que supone un contratiempo en la lucha por el 'factor cancha'. Sin duda, es una oportunidad perdida porque el Palencia, el Estudiantes y el Lleida habían perdido esta jornada.