Martín García Barbadillo

Plaza Mayor

Martín García Barbadillo


¿Parque tecnológico?

25/04/2022

Desde tiempos inmemoriales aparecen de manera recurrente en los medios, este entre ellos, informaciones sobre el parque tecnológico de Burgos. Por si ha aterrizado usted desde otra galaxia recientemente le explico de qué va el asunto. Resulta que, en 2006, la Junta de Castilla y León proyectó construir una especie de polígono para que se establecieran empresas punteras (tecnológicas, como su propio nombre indica), en un idílico páramo en las cercanías del autoproclamado aeropuerto de Villafría. Las obras se llegaron a iniciar en 2010 y por cuestiones burocrático-legales, una vez más, se pararon un año después. Parece que ahora, tal vez, se reanuden los trabajos pero la realidad es que se trata de otra instalación en ruina antes de inaugurarse. ¿Le suena?

En condiciones normales que se vaya a terminar una obra pública eterna sería una buena noticia pero, en este caso, yo diría que es lo contrario: lo cabal sería dejar que las balas de paja sigan rodando por sus calles hasta la eternidad. Me explico: este invento se pensó hace, pongamos, 20 años y hasta el nombre 'parque tecnológico' suena ya viejuno. En ese tiempo las empresas tecnológicas se han convertido en otra cosa: muchas son entidades con empleados que teletrabajan desde distintos lugares del mundo, se reúnen y tratan los asuntos por videoconferencia y si necesitan verse en persona alquilan oficinas (o puestos en oficinas) por días o por horas. La presencialidad tiene los días contados y coger un coche para plantarse en el seductor desierto que propone este parque puede que no aporte nada, a nadie. Además, todas las empresas, del tipo que sean, si quieren sobrevivir habrán de dar un salto tecnológico como están haciendo muchas de las presentes en los polígonos normales de la ciudad sin necesidad de un lugar específico para esos menesteres. Por si fuera poco, con los plazos habituales de la administración, cuando esté acabado resultará más desfasado que un polígono dedicado a la talla de bifaces de piedra. 

Si las instituciones quieren apoyar la innovación, podrían empezar ellos por innovar en la toma de decisiones, aunque quizás para eso necesiten primero construir su propio parque tecnológico, licitarlo, sacarlo a concurso…

Salud y alegría.