El Juzgado de Instrucción número 4 de Burgos ha decretado el sobreseimiento de la causa abierta a un empresario y un ingeniero por la presunta falsificación de placas de tractores agrícolas e intento de soborno a un responsable de la estación de ITV de Villalonquéjar. 

Según el auto al que ha tenido acceso este periódico, fechado el mismo día que la Guardia Civil difundió la nota de prensa a los medios de comunicación, no concurren «indicios sólidos de la comisión del delito de falsedad documental» por parte de A.G.G. e I.T.F., puesto que «con posterioridad a las diligencias de investigación» practicadas por la Guardia Civil se han solventado las divergencias sobre las homologaciones necesarios por los tractores.

Respecto al delito de calumnias, la jueza deja abierta la opción de reabrir la causa si se subsana un defecto formal, ya que no consta el previo intento de conciliación entre el ingeniero de la ITV, y el querellado. El profesional se ratificó en su declaración sobre «el sentido ofensivo y calumnioso» que apreció en las declaraciones del empresario A.G.G. sobre su proceder profesional. 

No pide una indemnización pero sí una rectificación de las expresiones vertidas por entender que afectan a su honor. Según sostiene, se presentó en su despacho y le tiró un sobre con billetes de 50. 'Me han dicho que esto lo podemos arreglar de esta manera', sostiene que dijo.