Los trabajadores de la Catedral irán a la huelga el 9 de abril

I.L.H.
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Denuncian un ERTE preventivo del Cabildo en abril alegando un descenso de visitas "cuando hay una recuperación clara y la nueva legislación permite ser rápidos si hace falta". Acarrean, además, "desgaste y estrés" por llevar 2 años del ERTE anterior.

Responsables de UGT junto al representante de los trabajadores de la Catedral, Julián Martín (d) - Foto: Valdivielso

Los 15 trabajadores de la plantilla de turismo "ya no aguantan más", ha afirmado Luis Gutiérrez, de UGT. Acumulan "desgaste y estrés" por llevar más de dos años de un ERTE que hoy termina, con insuficientes trabajadores atendiendo a los turistas, modificándoles los horarios y jornadas de un día para otro y saliendo y entrando del ERTE constantemente, lo que les ha generado malestar y dolor "que pueden confirmar las familias". Pero la gota que ha colmado el vaso ha sido el anuncio de un nuevo ERTE desde el 1 de abril de 2022 y hasta el 6 de enero de 2023. "No se merecen estos gestos que aducen a causas organizativas por la bajada de visitantes, y más cuando vemos en los medios de comunicación que hay buenas perspectivas de ocupación hotelera", han añadido desde el sindicato.

Por eso anuncian una huelga indefinida desde el 9 de abril, aunque confían en que los responsables del Cabildo e incluso el arzobispo, Mario Iceta, intervengan para evitarlo: "Albergo la esperanza de que don Mario, como buen médico, extirpe las célugas dañinas para evitar una metástasis. Lo pueden cambiar. La Iglesia de Burgos lo merece, los burgaleses, cristianos o no, la asamblea diocesana y, sobre todo, los trabajadores y su querida Catedral".

Desde UGT aseguran que no van a avalar ningún "ERTE preventivo" cuando "las perspectivas económicas además son favorables, y cuando la legistación permite iniciar este proceso rápidamente, en tres o cuatro días, si la situación cambia".

Los trabajadores han denunciado, por otro lado, una plantilla que funciona en estos momentos bajo mínimos, con solo tres personas trabajando a la vez para atender la tienda, la venta de tickets y vigilar. "Exigimos un mínimo de cuatro personas en invierno y seis en verano, y que se confíe en unos trabajadores que llevamos una media de 15 años trabajando en la Catedral, y algo sabremos".