Fernando Lussón

COLABORACIÓN

Fernando Lussón

Periodista


Rajoy y Feijóo advierten

29/09/2021

Los primeros pasos de la Convención Nacional del PP que ha comenzado en Galicia, pensada para reforzar el liderazgo del líder popular, Pablo Casado, tienen el objetivo de establecer una enmienda a la totalidad a la política económica del Gobierno y presentar su alternativa para resolver el desaguisado que dejará el Gobierno de coalición cuando los partidos que lo componen pierdan las próximas elecciones. Los invitados especiales en esta ocasión fueron el expresidente del Gobierno, Mariano Rajoy, quien ya tuvo que lidiar con la salida de una crisis económica con el déficit público desbocado, Y el presidente gallego, ALberto Núñez Feijóo,y ambos le animaron a desoír los cantos de sirena de Vox, que le alejan del centro. Ambos esperan que les haga caso.

Rajoy ha recomendado a Pablo Casado que se aleje del dogmatismo, la demagogia y el sectarismo, variantes del populismo que atribuye al Ejecutivo al que considera falto de un plan de reformas ya que solo se preocupa de aplicar contrarreformas a las medidas económicas implantadas por su gobierno que a su juicio han funcionado bien. Rajoy, sin embargo, no reconoce con la suficiente autocrítica que nada más llegar a La Moncloa recortó diez mil millones de euros del Estado de bienestar; que subió los impuestos que se había comprometido a bajar; que creo el ‘banco malo’ que dijo que nunca crearía y que no tendría coste para el erario público, lo que no se ha cumplido;, que tuvo que rescatar, sino al país si al sistema financiero con unas decenas de miles de millones que tampoco se van a recuperar; que después de rentabilizar la congelación de las pensiones de un año paso a establecer un sistema de congelación permanente mediante una subida del 0,25% a través del factor de sostenibilidad, y por no hablar de que bajo su gobierno se llegó a más de seis millones de parados, aunque al final de su mandato había recuperado más de dos millones de ellos.

Haciendo de arúspice de las vísceras de la política económica, Rajoy ha advertido a Casado que a él le tocará poner orden en la economía española comenzado por recontrarreformar el acuerdo sobre las pensiones alcanzado recientemente que vincula su incremento a la evolución del IPC y sobre todo le advierte de que quizá pronto cambien los vientos en la Unión Europea que han permitido incrementar los gastos estructurales para salvar el estado de bienestar en los momentos más duros de la pandemia y que pronto pueden venir las exigencias para que se cumpla el plan de estabilidad y volverán las presiones para embridar el déficit público.

Sería bueno que las conclusiones de la Convención Nacional del PP que se cerrará en la plaza de toros de Valencia, recogieran el programa económico a desarrollar para saber si habrá nuevos cambios en el sistema de pensiones y como serán los recortes a realizar para ajustar el déficit, y si las cañas que ahora se usan para acusar al Gobierno de subir los impuestos no se le tornarán lanzas como le ocurrió a Rajoy. Sobre todo es exigible que diga la verdad sobre lo que hará cuando llegue a La Moncloa como le pide a la vicepresidenta primera, Nadia Calviño, qu no mienta sobre el estado de la economía, que en cualquier caso será mejor que la que se encontró Rajoy, como el propio expresidente ha reconocido gracias a la aplicación de algunas medidas del escudo social, los créditos ICO y los ERTE, entre otras. Pero sobre todo Rajoy ha advertido a Casado que tendrá que volver a reformar las pensiones “y te hacen otra huelga”.