Ángeles somos, del cielo bajamos, huevos pedimos, si no nos los dan las gallinas morirán. Alicia, Sergio, Elvira... una veintena de niños de Ibeas de Juarros recorrieron ayer por la tarde con esta coplilla las casas y establecimientos del pueblo para celebrar el Jueves de Todos y dar el pistoletazo de salida al Carnaval. La tradición viene de lejos, pero ahora se ha recuperado y con lo recolectado se organizará una gran merendola mañana por la tarde.

El sol animaba salir de casa y también a arrancarse con los cánticos. Se repartieron los folios para tener presente en todo momento la letra de las coplillas y se cogió una carretilla para poder transportar los alimentos. Un par de ensayos antes de arrancar y todo estaba listo para ir a saludar a los vecinos. La primera parada llegaba en la casa de Marisa, donde hasta a su perro parece que le hizo ilusión la visita. Primeros huevos conseguidos que bien valen una tortilla.

La ruta seguía con cánticos por todas las calles y poco a poco la 'banda' cada vez sonaba mejor. ¡Qué arte y qué alegría aportan los pequeños!, debían pensar aquellos que les escuchaban. Su recompensa llegaba con los regalos de los vecinos. ¡Aguinaldo, aguinaldo!, le decían a Inés. Mientras, de la vivienda de Candelas recibieron otra caja de huevos y de este modo fueron llenando la carretilla, con morcillas y chorizos incluidos. Todos felices y disfrutando de la cita.

Los niños pidieron por las casas entonando unas coplillas tradicionales. Candelas les entregó unos huevos para su merienda de mañana. - Foto: Jesús J. Matías

La histórica fiesta viene de la escuela y justo el año antes de la pandemia se consiguió recuperar. Sin embargo, la crisis sanitaria frenó toda la actividad social y hasta ayer no se retomó (...).

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