Las calles de Villarcayo han vuelto a verse anegadas por las aguas. El deshielo y las precipitaciones han hecho que los ríos de la cuenca del Ebro vean aumentado de manera notable su caudal durante la noche y las primeras horas de la mañana, lo que ha propiciado problemas en diversos puntos de Las Merindades, principalmente.

Las previsiones de la Confederación Hidrográfica del Ebro de incremento en el caudal de los ríos se han visto confirmadas y esta mañana diversos puntos de Las Merindades, principalmente Villarcayo, han amanecido con problemas debido al agua. En la localidad villarcayense el Nela ha visto aumentado su caudal y ha inundado diversas zonas, llegando hasta las Acacias. Allí, por ejemplo, los niños han sido desalojados de los colegios y en el instituto los alumnos ni tan siquiera han podido acceder a las aulas al encontrarse inundados los accesos. Los niveles actuales superan en Villarcayo a los que se registraron en la jornada del 31 de enero, ya que en torno a las 13.00 horas, la de mayor acumulación de agua, la altura del río es de 3,58 metros y su caudal, 158,9 metros cúbicos por segundo.

En otros puntos de la comarca, como en Trespaderne y el Valle de Mena, los problemas han sido menores. En Trespaderne se ha desalojado el camping en previsión de posibles problemas, aunque el Nela en dicho punto no ha rebasado el umbral, situándose en 4,34 metros y 440 metros cúbicos. En el Valle de Mena algunas zonas de regadío y campos presentan grandes cantidades de agua. El embalse del Ordunte, por ejemplo, está cerca de su capacidad máxima.

Por último, atención también para el río Trueba, que registraba una notable crecida en las últimas horas de la mañana a su paso por Espinosa de los Monteros (100,34 metros cúbicos por segundo) y Medina de Pomar (111,34)

En otras zonas los riesgos existen, aunque son menores. En Frías los caudales han aumentado, aunque no se prevén problemas a pesar de que por la tarde l avenida se dirige a aquella zona. Tampoco en Miranda el río se ha desbordado pese a que desde la tarde de ayer está activada la situación de emergencia y de que la Delegación Territorial de la Junta en Burgos ha activado esta misma mañana el INUNcyl. Aquí la Confederación Hidrográfica del Ebro preveía un caudal para esta tarde/noche de 765 metros cúbicos por segundo que podría a llegar a los 800 durante la madrugada. Sin embargo, tras el pico alcanzado a las 17.00 horas (el caudal era de 684 metros cúbicos por segundo y la altura del río, de 4,88 metros), el mismo ha ido decreciendo progresivamente. También el Zadorra presentaba niveles elevados, un factor a tener en cuenta y que en las inundaciones del 31 de enero resultó determinante.

El Servicio de Emergencias 112 ya avisaba de previsión de deshielos de Protección Civil en la cordillera Cantábrica y de la posible incidencia de las precipitaciones.

Carreteras.

En cuanto a carreteras, está cortado un carril en la N-629 entre Oña y Trespaderne debido a un desprendimiento. La misma carretera se encuentra intransitable en Villarcayo, que está siendo la localidad más afectada en todos los aspectos. Tampoco se puede transitar por la CL-629 (kilómetro 64), la N-232 (273), la BU-561 (puntos kiloméricos 6-7) y la BU-562 (1).

En el resto de la red viaria del norte de la provincia se recomienda mucha precaución por la presencia de balsas de agua.