La incertidumbre económica y los negros nubarrones que augura una inflación disparada no parecen afectar -por ahora- a la evolución del mercado de trabajo provincial, que alcanza los mejores registros de la última década. Hay menos empresas que antes de la pandemia, pero las 10.721 que están activas han registrado en nómina a un total 114.000 trabajadores, la mayor cifra registrada por la Seguridad Social desde el año 2013.

En lo que va de año, es decir, entre los meses de enero y mayo, último dato hecho público, se han inscrito 200 nuevas empresas en Burgos, mientras que la cifra de empleo ha crecido en 4.154 inscripciones con respecto a mayo de 2021, lo que visualiza que la economía local da por superada la pandemia y está generando empleo y actividad para responder a una mejora económica.

Con respecto a antes de la pandemia (2019), la nómina ha crecido en 1.886 trabajadores inscritos, y si se remonta a mayo de 2013, último dato en el histórico de la Seguridad Social, son casi 17.000 empleados más.
Hay que matizar que la estadística de la Seguridad Social recogen el número de situaciones que generan obligación de cotizar; es decir, explica el organismo, «considerando que la misma persona se contabiliza tantas veces como relaciones laborales tenga se estarán contando los pluriempleados tantas veces como empleos tengan dentro del ámbito de la estadística».

Pese a esta evolución tan positiva, aún quedan lejos los registros de sociedades mercantiles de antes de la crisis sanitaria, pues en 2019 se rozaban las 11.000 empresas, y mucho más lejos queda el récord que se alcanzó en julio de 2016, con casi 11.200 operativas en la provincia.

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